Varias gaviotas pescan ayer junto al bote de investigación Pelícano en la costa de Cocodrie (EEUU), una ciudad en el Golfo de México, zona afectada por el vertido de crudo ocurrido después de una explosión en la plataforma "Deepwater Horizon", operada por British Petroleum (BP). | Efe

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Miles de voluntarios han comenzado a movilizarse y a recibir capacitación por parte de la empresa British Petroleum (BP) y de las administraciones locales, para trabajar en la limpieza del crudo, una vez el grueso del vertido llegue a la costa.

Ante el desplazamiento de la mancha de petróleo hacia las orillas de los estados de Luisiana, Misisipi, Florida y Alabama, los voluntarios, procedentes de distintos puntos de Estados Unidos, podrían ser llamados a la acción en las próximas semanas, según fuentes de las organizaciones de voluntarios.

Por el momento, la petrolera británica y autoridades han ofrecido al menos una decena de sesiones de entrenamiento en varias localidades de Luisiana y de Misisipi, en las que han dedicado unos 20 minutos a ofrecer consejos sobre seguridad y salud, como hidratación y protección solar, y otros 45 a contestar a dudas.

Aunque las acciones de limpieza aún están en fase de planificación, una coalición de organizaciones, que incluye la Sociedad Nacional de Audubon, la Federación Nacional de Fauna y Flora y la Red de Restauración del Golfo, ha puesto a disposición de las autoridades sus bases de datos para movilizar a más gente.

La alta participación y llamadas han desbordado las previsiones de estos colectivos, que se han visto obligados a atender, informar y pedir que esperen a los voluntarios.

En menos de tres días, la Coalición de Restauración de Luisiana Costera, ubicada en Baton Rouge, había conseguido 10.000 registros y, en menos de cuatro, una nueva web «OilSpillVolunteers» había reunido a otras 4.000 personas.

Para participar en las tareas de recolección de posibles restos de petróleo, los voluntarios deberán presentar certificados de formación sobre materiales peligrosos, que requieren entre ocho y treinta horas.

El Departamento de Trabajo emitió esta semana un comunicado advirtiendo de que las personas que trabajen en la limpieza de la costa se enfrentan a posibles peligros derivados del contacto con el petróleo, con dispersantes, detergentes y desengrasantes.

Los voluntarios también podrían sufrir daños por «ahogo, agotamiento por calor y caídas, así como por insectos, serpientes» y otras especies salvajes que tienen su hábitat en las zonas afectadas, según el texto.

«Los trabajadores de la limpieza de petróleo están en el frente contra este desastre,» dijo la Secretaria de Trabajo estadounidense, Hilda Solís.

«Es nuestra prioridad principal garantizar que esto se realice en la forma más eficaz, eficiente y segura posible», afirmó Solís.

Expertos de la industria petrolera advirtieron hoy en el Congreso de EE.UU. que el derrame de crudo en el Golfo de México podría superar los 40.000 barriles (6,4 millones de litros) diarios.

Ese vertido podría ser ocho veces superior al de 5.000 barriles diarios (800.000 litros) calculados tras el hundimiento el pasado 22 de abril de la plataforma «Deepwater Horizon», operada por British Petroleum (BP), dos días después de una explosión que cobró la vida de 11 trabajadores.