David Gómez | E. Thomsen

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Es un hombre guapo, sensible, extrovertido, ambicioso... que quiere llegar lo más alto posible en el mundo del espectáculo: música, teatro, cine. Compone y da conciertos de piano por todo el mundo. Ha realizado varios cortos y anuncios de televisión. Va a grabar, en Londres, un álbum con piezas suyas que tiene un aire muy cinematográfico. Estos días actúa en Mallorca con "El concierto de las velas". David Gómez nació en Wattwill (Suiza) el 13 de enero de 1974 . Es concertista de piano. Está soltero. Le gusta hacer footing y leer.

Desde hace varios años presenta "El concierto de las velas" donde interpreta obras de Bach, Chopin, Mozart... en un piano que está sobre una plataforma móvil y se desplaza encima de las vías del Tren de Sóller en la estación de Bunyola. Esta vez será el 5 de agosto.
Xisco Busquets.- ¿Cómo se le ocurre hacer un concierto rodeado de velas...?
David Gómez.- Estudié cuatro años en el Conservatorio de Rotterdam. Los holandeses utilizan las velas en su vida cotidiana y como yo odio la luz artificial, pensé que podría ser muy bonito hacer un concierto de piano a la luz de las velas.
X.B.- Y el tema de las vías del tren...
D.G.- Me gusta crear ambientes, acercar a la gente al mundo de la música clásica, que a veces es muy elitista. Interpretar, sobre una plataforma encima de las vías del Tren, a J.S.Bach, F.Chopin...es diferente, pero no deja de ser excitante.
X.B.- El hecho de llevar varias ediciones es señal que tiene una buena acogida.
D.G.- Estoy contento porque cada año hay más público. Es una señal de que la música es el lenguaje internacional por naturaleza. Me gusta cuidar todo tipo de detalles en mis conciertos. Quiero que la gente se sienta actor o actriz en mis recitales. De la música me encargo yo (Risas).
X.B.- ¿Qué lo diferencia de otro concierto?
D.G.- Normalmente suelo actuar por el mundo en teatros, auditorios... donde el ambiente es mucho más frío. En este caso, la luz, el ambiente y el lugar, hacen que el concierto sea mágico.
X.B.- Cuando viaja ¿Se da un tiempo para conocer el país o llega con el tiempo justo?
D.G.- Pues no suelo tener mucho tiempo, pero obviamente dedico al menos un día para conocer algo de la ciudad que visito. Me considero un afortunado por haber visitado tantos países y poder hacer lo que me gusta.
X.B.- Usted vive centrado en la música: conciertos, componer... ¿Qué más le interesa de la vida?
D.G.- La felicidad de la gente. Deberíamos pensar más en los demás, en los que no tienen nada. Odio esta sociedad que nos rodea, cada vez más racista y más egoísta.
X.B.- ¿Y el tema de las novias, hijos...?
D.G.- He tenido novia, hijos no sé (Risas). Como dice mi padre, más vale sólo que mal acompañado.
X.B.- ¿Hay algún motivo concreto por el que está soltero: desengaño amoroso, no soporta convivir con nadie...?
D.G.- Si la vida me niega algo, es porque vendrá algo mejor, y estoy seguro que llegará...
X.B.- Cuando la absorción profesional es tan elevada como la suya es señal inequívoca que le agrada mucho... ¿Cómo supera los malos momentos que todos tenemos en la vida?
D.G.- Cuando hay un mal momento, la música es la que más me ayuda a superar todo. Es la mejor medicina.
X.B.- ¿Qué cualidades se reconoce para interpretar las composiciones de otros músicos?
D.G.- Es importante valorar el estilo de las obras, lo que el autor quería transmitir en esos momentos. Obviamente cada intérprete da un color especial a cada obra.
X.B.- ¿Cómo definiría sus propias creaciones? ¿Tienen que ver con su forma de ser, de estar en el mundo, de pensar...?

Estoy componiendo muchas piezas que tienen un aire muy cinematográfico. De hecho voy a grabar un álbum con esas piezas en Londres”

D.G.- Estoy componiendo muchas piezas que tienen un aire muy cinematográfico. De hecho voy a grabar un álbum con esas piezas en Londres. Normalmente en mis conciertos toco esas piezas como 'bises'. Cada una de esas piezas es una vivencia muy intensa.
X.B.- ¿Cómo es usted realmente?
D.G.- Extrovertido, sensible....creo que cuando estoy delante del piano, es cuando realmente soy yo...
X.B.- ¿Cuál es su opinión sobre el momento actual?
D.G.- ¡Hay que ser positivos siempre, amigo Xisco!
X.B.- Tiene razón. Y sus inquietudes políticas, sociales, ... ¿Cuáles son?
D.G.- La política y la música no van unidas. Me gustaría poder dar más conciertos en lugares donde nunca han escuchado un piano, la música transmite ilusiones, emociones.
X.B.- ¿Y esto de la "crisis"?
D.G.- Me da gracia cuando la gente pronuncia la palabra "crisis", entonces los que se mueren de hambre ¿qué palabra deberían pronunciar? Vivimos en una burbuja. Muchas veces habría que mirar al cielo, respirar, y pensar que no somos los únicos del planeta. Hay que tratar de ayudar, no es necesario tener mucho para hacerlo, porque todos podemos ofrecer algo.
X.B.- ¿Usted qué ofrece?
D.G.- Seguir comunicándome con la gente a través de la música, y si eso hace que seamos un poco más felices, el fin justifica los medios.
X.B.- ¿Ha encontrado el sentido de la vida?
D.G.- La vida es como la música, fugaz.... ¡Hay que vivir hoy!
X.B.- Conocer mundo, ser aplaudido después de un concierto, poder ganarse la vida en algo que disfruta... ¿Se considera un privilegiado?
D.G.- La verdad es que sí. El aplauso del público después de interpretar una pieza es el mejor regalo que un músico puede tener. Conocer mundo y conectar a través de la música con diferentes culturas es un lujo para el cuerpo y la mente.
X.B.- ¿Qué otra actividad, oficio o trabajo le gustaría hacer su no fuese músico?
D.G.- Me gusta mucho actuar, he realizado, como actor, varios cortos y varios anuncios de TV. Creo que si no fuera músico sería actor, presentador de TV....
X.B.- ¿Cómo alimenta su espiritualidad?
D.G.- De primero: Música, de segundo: Música y de postre: más Música.
X.B.- ¿Tiene alguna manía?
D.G.- Algunas (Risas) Enciendo y apago las luces antes de un concierto dos veces, y siempre salgo al escenario por la parte izquierda.
X.B.- ¿Cómo le gustaría que le recordaran?
D.G.- Prefiero que se acuerden de mi ahora. Vivimos en un país donde sólo interesa el fútbol (aunque me gusta) y los toros (no me gustan)...¿qué pasa con los concertistas de piano? (Risas) Necesitamos educar más y mejor a los niños, para que éstos, cuando crezcan sepan apreciar la música culta.