Julio Bastida13/05/10 0:00
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Aproximadamente sobre las nueve y media de la mañana de ayer, varias llamadas alertaron a los servicios de emergencia de que habían caído varios cascotes sobre la calzada procedentes de un edificio antiguo.
Los hechos se produjeron en un viejo inmueble de tres plantas situado en la calle Desemparats, una travesía que limita con la calle Socors y con Bosc, todos ellos en el casco antiguo de Palma. Como medida de seguridad, varias viviendas ubicadas en las proximidades de edificio en ruina fueron desalojadas.
Rápidamente acudieron hasta el lugar del suceso varias dotaciones de la Policía Local de Palma y precintaron la zona además de cortar los accesos. A la llegada de los bomberos, con la ayuda de un camión autoescalera realizaron las primeras revisiones del inmueble y, rápidamente, comprobaron que el edificio presentaba un lamentable estado. Acto seguido también se personó en el lugar un técnico municipal de urbanismo y varios especialistas en patrimonio.
Tras realizar una exhaustiva revisión integral de la vivienda, los expertos afirmaron que el inmueble presentaba importantes daños estructurales y existía peligro de derrumbe.
Dificultad
Además, los trabajadores tuvieron grandes dificultades para poder apuntalar parte del bloque. Al parecer y, según manifestó el abogado que representaba los intereses de varios inmuebles afectados de la calle Desesperats, la licencia para derribar los inmuebles ya estaba presentada en el ayuntamiento.