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Las cifras de ingresos siguen cayendo en las cuentas de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). Tanto que, en Balears, el pasado año la entidad recaudó 490.000 euros menos que en 2008. Aun así, y pese a la crisis, logró facturar hasta 8,8 millones de euros en un año, 2009, que estuvo (y continúa en 2010) marcado por la polémica con los ayuntamientos por el cobro de la música utilizada para animar sus fiestas o por las deudas acumuladas en años anteriores.
Sobre esto, el director de la zona mediterránea de la SGAE, Ramon Muntaner, explicó que se encuentran en plena negociación con aquellos consistorios que tienen deudas contribuidas por «la comunicación pública de las obras protegidas», pero eludió cualquier apunte sobre el conflicto al estar tratando este asunto con «la Federació de Entitats Locals de Balears». Muntaner sí reconoció que sobre la entidad pesa hoy una imagen negativa y lamenta que, «en muchos momentos, se nos acusa de voracidad recaudatoria».
Valoraciones a un lado, la entidad vuelve a cerrar ejercicio con un descenso de ingresos en las Islas y también en el conjunto de España, donde las cifras alcanzan los 316,8 millones de euros, un 5,1 % menos que en 2008. «La buena noticia es que cada año hay incorporación de más socios y que nos encontramos en un mal estado económico, pero creativamente bueno», sostuvo Muntaner, durante la presentación del balance de 2009, que detalla que se registraron un total de 665 obras y se incorporaron 124 nuevos socios, alcanzando ya los 1.778.
En negativo
Los descensos de ingresos más acusados en Balears corresponden al ámbito de la radiodifusión (-17,45 por ciento) y al de los derechos generados por los conciertos de música en directo (-15,10 por ciento). En 2008, la SGAE percibió 506.422 euros por estas actuaciones y en 2009, 429.948, siendo los conciertos de El Canto del Loco, Miguel Bosé, Bisbal, Leonard Cohen, Amaral, Amaia Montero o Serrat los que más beneficios generaron. «El pasado año no hubo grandes conciertos en Mallorca porque los promotores no se quisieron arriesgar», apuntó la delegada territorial, Victòria Rullán.
Las cifras positivas de 2009, por otro lado, las ofrecieron los conciertos sinfónicos (59.301 euros), la música en orquestas de baile (327.550) y el uso de música grabada (2.762.529). Al igual que las artes escénicas, que en 2009 lograron un aumento de ingresos de hasta un 15,06%, alcanzando los 258.437 euros. Según detallaron, los montajes Hoy no me puedo levantar, Los 39 escalones, Un Dios salvaje o Quisiera Ser fueron los que más derechos generaron.