TW
0

La llama de la lengua catalana volvió ayer a hacerse presente en la Isla después de tres años de ausencia. Y lo hizo en el Santuario de Lluc, «símbolo máximo de la mallorquinidad» y acompañado por un gran número de seguidores. El prior de Lluc, Jaume Reynés, y los Joves de Mallorca per la Llengua fueron los encargados de dar el pistoletazo de salida simbólico al Correllengua que, durante tres semanas, recorrerá los diferentes pueblos de Mallorca en nombre de la defensa y la promoción de la lengua catalana.
Después, una gran cadena humana enlazó la plaça del Lledoner y la entrada del Santuario, pasándose de mano en mano la llama, una pequeña muestra de la carrera de relevos no competitiva en favor de la lengua, que hasta el próximo 8 de mayo, se vivirá en las principales calles de la isla.
El inicio del Correllengua 2010 compartió protagonismo con la Trobada de socis i amics de l'Obra Cultural Balear que se celebra cada dos años, y con la clausura de la campaña Cafè per la Llengua que desde el 2008 organiza la institución balear. Según la organización, «alrededor de 1.000 personas participaron en las actividades», que estuvieron amenizadas por una ballada popular, por la actuación musical del grupo mallorquín Els Amics de les Arts y por los Castellers de Mallorca.