José María Rodríguez, en un momento del pleno de ayer | Jaume Morey

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El pleno del Parlament estuvo ayer marcado por los empates en las votaciones -la ausencia de Munar propiciaba el resultado de 29 a 29- y por una trifulca entre diputados en el que participó activamente el parlamentario popular José María Rodríguez.
De hecho, un empate en la votación evitó que pudiese prosperar una propuesta del Bloc para que los diputados dejen de tener «privilegios» jurídicos de los políticos. En una votación sobre política de vivienda, el PP ganó varias votaciones, en otras hubo unanimidad, pero también se produjo un empate. En este caso, la iniciativa decae y, por lo tanto, no prospera.
Al margen de las votaciones, el Parlament vivió ayer momentos de tensión y los diputados pusieron a prueba la capacidad de la presidenta en funciones, la socialista Aina Rado, para dirigir el debate. Durante una pregunta, José María Rodríguez, del PP, recordaba desde su escaño a los socialistas que también tiene diputados con imputaciones judiciales. Rodríguez señalaba a Marc Pons y Xicu Tarrés. La «número dos» del PSOE, Rosa María Alberdi, contestaba desde su escaño a un Rodríguez visiblemente molesto, mientras Aina Rado intentaba poner orden y llamaba la atención al diputado del PP. Según Rodríguez, Alberdi llamó corruptos a los parlamentarios del PP.