Cristobal Sbert, Xavier Bonet, José Tomàs Montserrat, Alfonso Ballesteros, Luis Alejandre, Miquel Vaquer, Salvador Moll y Pedro Campaner. | Curro Viera

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Con una solemne ceremonia, la Reial Acadèmia de Medicina de les Illes Balears inauguró el curso 2010-2011 y entregó sus tradicionales distinciones. El presidente de la Acadèmia, Bartomeu Anguera, presidió un acto en el que se reconoció la gran labor de María Gómez, Gregorio Rodríguez Boto, Àngel Arturo López, José María Rapáriz, Manuel Fernández Arjona, Josep Mateu Sbert, Jordi Reina, Isabel Cenicero, Josep Antoni Tur, Christian Diego Rolfo y Mariano Ozonas. Los problemas de financiación de la institución y la necesidad de que la administración se implique en esta fue uno de los aspectos más destacados de la intervención de Anguera. También se dio la bienvenida como académicos correspondientes por elección a Pierre Fauchard y a Miquel Roca. Oxidoc y Exclusivas Tirme también tuvieron su reconocimiento con la distinción de las Cédulas Fundacionales 1788.