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El Real Mallorca es un 'clásico' de la Copa y las últimas tres temporadas son un claro ejemplo de que esta afirmación no es ni mucho menos gratuita. El conjunto de Gregorio Manzano es el único que en los tres últimos años se ha clasificado siempre para disputar los cuartos de final. Ni siquiera el Barça o el Valencia, los dos últimos campeones, han llegado tan lejos en este torneo. Y es que el once balear tiene una gran estima a una competición en la que ha disputado tres finales y cuatro semifinales. El año pasado el penalti que detuvo Pinto a Pep Lluís Martí evitó que los baleares pudieran disputar la cuarta final de su historia.

En la temporada 07/08 fue precisamente el Getafe el rival de los mallorquinistas en la Copa del Rey y en esa ocasión la victoria final fue para el conjunto 'azulón'. Los baleares sufrieron una derrota mínima en el Coliseum Alfonso Pérez (1-0), en un duelo marcado por la decisión del preparador de reservar a Juan Arango, Dani Güiza y Ariel Ibagaza, ya que ninguno de ellos fue titular. En la vuelta, con la afición celebrando ya el pase a las semifinales -remontó con goles de Arango y 'el Caño'- una falta lateral botada por Granero sorprendió a Lux y provocó la clasificación del conjunto madrileño, rival de hoy, que apeó al Racing en semifinales y perdió la final ante el Valencia (3-1).

La pasada temporada, el Mallorca apeó a Málaga y Almería para plantarse en los cuartos de final ante el Betis. Tras ganar 1-0 en Palma (gol de Keita), el bloque isleño supo contener en el encuentro de vuelta (0-0), logrando el pase a las semifinales. El Barça se presentó como el último escollo antes de la final. El Barcelona era el último escollo antes de la final. La derrota (2-0) en el partido de ida supuso un jarro de agua fría para el equipo y la afición. Sin embargo, el Mallorca dio la cara en el partido de vuelta. No sólo eso, sino que incluso rozó el milagro. Un golazo de Castro abrió la puerta de la final, una cita que el mallorquinismo tocó con las manos cuando el colegiado señaló un penalti favorable con 1-0 en el marcador.

Pep Lluís Martí asumió la responsabilidad, pero su lanzamiento fue despejado in extremis con el pie por Pinto. Guardiola sacó a Messi y el argentino, con un gol de vaselina ante Germán Lux, finiquitó el duelo y la eliminatoria. Al final, el cuadro azulgrana alcanzó al final, iniciando ante el Athletic la mejor racha ganadora de toda su historia con 6 títulos.

Hoy se mide al Getafe, un rival que también parece tenerle tomada la medida a la competición, ya que persigue su tercera final en los últimos cuatro años.