Alis dio el pistoletazo de salida. | P. Pellicer

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Alrededor de mil quinientas motos se dieron cita en la mañana de ayer en Jaime III, de Palma, para participar en la Moto Rock Mallorca, que va ya por su 14 edición, y que está organizada por Rock&Gol, emisora de la Cope, que contó con la colaboración de El Corte Inglés y 1/2 Milla Sport Club.
Antes de que las motos comenzaran a rugir, los futuros campeones del mundo de motociclismo -si no todos, sí alguno seguirá los pasos de Lorenzo-, la Lorenzo Competición, chavalines pertenecientes a la escuela del padre de este, hicieron una exhibición que a más de uno nos dejó con la boca abierta. Mientras, entre las motos y los motoristas, se paseaba una domadora de serpientes a la vez que un tragafuegos humano expulsaba bocanadas de fuego.
A todo esto, montada en una Honda Goldwind, escoltada por otras catorce máquinas de la misma marca y cilindrada -una de ellas conducida por Primo, el segurata más famoso de España-, apareció la bella Alis Giménez, con la antorcha en la mano.
Alis, morena, guapa, exuberante, se convirtió en la reina de Jaime III, pues todos querían fotografiarse con ella. Luego, subida sobre una tribuna, dio el antorchazo de salida y las motos comenzaron a rodar: Palma-Esporles-Banyalbufar-Estellencs- Andratx y hotel Mallorca Rocks, de Magaluf.
En dicho hotel tomaron las cervecitas de rigor, se bañaron-cuentan que hubo hasta camisetas mojadas-, se divirtieron y almorzaron.
A las seis de la tarde comenzaron a regresar a Palma, y sobre las ocho, algunos se acercaron al puerto a despedir a los que se habían desplazado desde la Península para participar en este Moto Rock.