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El Teatre Principal abrió la 36 Temporada de Ópera con L’ elisir d’ amore, de Gaetano Donizetti, en un montaje maravilloso firmado por José Martret y con Diego Martín-Etxeberria como director musical. La soprano Veronica Granatiero maravilló a todos, al igual que el resto del elenco que sobre el escenario dio una lección de amor moderno por la música clásica. Fue un disfrute total que gozamos personas tan dispares como Pepa Charro o Ramon Servalls, amantes de la música ambos, devotos de la ópera todos.

Pep Cerdà está haciendo una gran labor como director del Principal; yo solo tengo una queja, lo mal que se arreglan algunos para disfrutar de un espacio tan bello y el poco favor que hacen al espectáculo, porque en las grande óperas del mundo el espectáculo como es bien sabido no solo está sobre el escenario, se disfruta también en los palcos y el patio de butacas. Hay millones de formas de ir bien vestido, se lo aseguro.