Exposición 'Miguel Ángel Campano. Accents i diferència' en Es Baluard

Jero Martínez habló de su experiencia y relación profesional y personal con el artista. Contó la anécdota de cuando visitó a Campano en su estudio para escoger las obras que presentaría en la primera exposición en 1993 y se encontró que todas las obras eran en blanco y negro en vez de la serie Ruth y Bootz tan conocida en aquel momento. Amador habló de la amistad que entabló con el artista, de la coordinación de la serie Elias, producida en los talleres de Edicions Maior. De sus inquietudes como pintor, de sus vivencias tan explosivas y carismáticas, que siempre iban al límite tanto en el arte como en su vida, de su relación con la naturaleza, con el mar y sus vivencias en Pollença y de la admiración que tenía hacia él.

Amador agradeció al Museo Es Baluard la realización de esta exposición tan merecida, ya que Mallorca tenía una deuda importante con el artista que residió y convivió tantos años en la Isla. Toni de Cúber, director de Can Puig, donde Campano trabajó en los talleres de obra gráfica realizando la serie de Plegarias, y hablando de sus obras de Poca plata. Toni Barrero lo conoció más tarde, y nos habló de la gran admiración que sentía por él, por su humildad, su cultura, por la música, por su relación con la Serra de Tramuntana y de su vida en Sóller. Entre el público asistente: Manel Domingo, Dolores Martínez, Luis Fuster, Neus Cortés, Carmen Ortega, Feli Marcos y yo también me animé, hablamos de nuestras experiencias con el artista y creo que por un instante volvimos a ser felices viviendo arte de verdad.