TW
2

El portavoz de la agrupación socialista de Calvià y precandidato del PSOE a la Alcaldía, Alfonso Rodríguez Badal, presentó ayer un plan de recorte de gastos municipales que su formación elevará, vía moción, al pleno municipal.
Rodríguez Badal aseguró que con las medidas de austeridad presentadas, el Ajuntament conseguirá reducir el gasto municipal en dos millones de euros cada año.
El plan de recorte de gasto prevé la supresión de los contratos de la Unidad de Servicios de Mediterrània y Alcari, relativos a la contratación de dinamizadores culturales y otro personal no imprescindible para la gestión de los asuntos públicos.
También apuesta por la supresión de las partidas de Trabajos Técnicos y Publicaciones del área de Patrimoni, la supresión de la Oficina Calvià por el Clima, de los gastos del capítulo 2 del área de Habitatge, la supresión íntegra del programa de Qualitat dentro de Organización e Informática, así como la de la partida de Asistencia Técnica y del 50% de Publicidad y propaganda del área de Seguretat.
Coches oficiales
La medidas también pretenden la reducción del resto del capítulo 2 del área de Participación ciudadana en un 50%, disminución en un 50% de los gastos de comunicación y relaciones institucionales del equipo de gobierno, reducción de la partida de gratificaciones al personal, reducción del 50 por ciento de las asesoría ligadas al área de Urbanismo, reducción del 50% del capítulo 2 del programa de la Finca Galatzó, eliminación de trabajos técnicos y publicaciones del área de transportes.
Asimismo, el PSOE pide mantener un único coche oficial de uso exclusivo del alcalde, eliminando, expresamente, chóferes de otros vehículos oficiales actualmente a disposición de concejales y otros cargos.
Finalmente, los socialistas también animan a destinar, íntegramente, el canon inicial que se ingrese por la concesión del servicio de agua potable a reducir el endeudamiento a largo plazo.
Asesores
En su comparecencia ante los medios de comunicación, Rodríguez Badal denunció que el alcalde Carlos Delgado (PP) continúa con su política de «despilfarro» y, en muchas ocasiones, de «gastos superfluos», al tiempo que volvió a criticar el «elevado nivel salarial» del primer edil, así como su «elevadísimo» número de asesores.