El fiscal pide que el hombre condenado por matar a su mujer embarazada y a su hijo de siete años en sa Pobla continúe en prisión

El representante del Ministerio Público solicita que siga en la cárcel hasta que el TSJB resuelva el recurso de su defensa

Ali Khouch, durante el juicio con jurado en la Audiencia de Palma

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El fiscal ha pedido este jueves por la mañana que el hombre condenado a prisión permanente revisable por matar a su mujer embarazada y a su hijo de siete años en sa Pobla continúe en la cárcel hasta que el Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears (TSJIB) resuelva el recurso contra la sentencia de la Audiencia de Palma. Ali Khouch ha sido conducido a la sede judicial para la celebración de la vista de prórroga de prisión.

El representante del Ministerio Público, Antonio Aponte, ha solicitado que el asesino permanezca en la cárcel durante 20 años, ya que el tiempo de máximo de cumplimiento efectivo es de 40 años. El abogado de la defensa, Miguel Ángel Ordinas, que recurrió la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears se ha opuesto a esta medida.

La Audiencia condenó al hombre a 25 años de cárcel por matar a su mujer, Warda Ouchene, y a prisión permanente revisable por la muerte de su hijo de siete años. La presidenta del jurado popular también le impuso seis meses de cárcel por maltratar de forma habitual a su esposa. El enjuiciado deberá abonar casi 800.000 euros a los familiares de la mujer asesinada, que fueron representados por los abogados Pablo Juanico, Sandra González y Mercedes González.

Los hechos enjuiciados se remontan a las 23.00 horas del 16 de mayo de 2021. Ali Khouch, de 39 años y origen marroquí, inició una discusión con su mujer, Warda Ouchene, de 28 y la misma nacionalidad, en el domicilio familiar situado en la calle Santa Catalina Thomàs. El agresor cogió un cincel de 33 centímetros y golpeó en la parte posterior de la cabeza a su pareja, que estaba embarazada de 21 semanas. Al ver que seguía con vida forcejeó con ella y la cogió del cuello para estrangularla hasta matarla, causando también la muerte al feto.

A continuación se dirigió a su hijo de siete años, que había presenciado la agresión a su madre, y también lo asfixió. Ali Khouch cerró la puerta con llave y se fue a Palma en coche. Al día siguiente por la tarde llamó a la Guardia Civil para confesar los crímenes y entregarse en el Portitxol, donde fue detenido por la Policía Nacional.