La adolescente electrocutada en Son Costa sale de la UCI e inicia su recuperación en planta

La menor sufrió una fractura de fémur, peroné, cadera, además de una quemadura de tercer grado en el gemelo

Equipos de emergencia atendiendo a la menor accidentada en el suelo

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La adolescente que la semana pasada sufrió una microdescarga en el paso elevado de Son Costa, sale de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) e inicia su recuperación en planta. La joven, a consecuencia de la caída, sufrió fractura de peroné, fémur y cadera. Además, presentaba una quemadura de tercer grado en el gemelo. Afortunadamente, la evolución de la paciente es favorable dentro de la gravedad de las lesiones.

El accidente ocurrió en torno a las cuatro de la madrugada, junto a un paso peatonal situado en el cruce de las calles Jacint Verdaguer y Blanes Viale. La víctima se encontraba con un grupo de amigos de Manacor y Campos cuando decidió acceder a la catenaria del tren, a través de una verja de hierro fracturada, para hacerse una fotografía. La adolescente se encaramó a un travesaño y al llegar al centro tocó el cableado del tren y recibió una descarga eléctrica que provocó que cayera desplomada a las vías desde una altura aproximada de ocho metros, según informaron fuentes de la Policía Local de Palma. La perjudicada se quejaba de dolor en la cadera tras la caída y también en las manos y el gemelo por las quemaduras que sufrió al electrocutarse.

Un amigo de adolescente bajó enseguida para auxiliarla, la cogió en brazos y la dejó a un lado de las raíles hasta que llegaron los equipos de emergencias, que tuvieron dificultades para acceder hasta el lugar en el que se produjo el accidente.

Desde Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) contactaron con los equipos de emergencias para cortar la tensión eléctrica y que pudieran atender a la adolescente sin riesgo, pero no fue necesario. Una ambulancia la trasladó al hospital Son Espases, donde quedó ingresada en estado grave. Nada más producirse el accidente, desde SFM, a través de su gerente, José Ramón Orta, explicaron que si la menor hubiera sufrido una descarga de 1.500 watios estaría muerta. Esa potencia viene a ser como la de una silla eléctrica. Lo que sucedió es que la joven debió tocar los cables de la catenaria y se produjo una microdescarga que le hizo perder el equilibrio y caer sobre las vías.