La Policía Local imputa a los autores de una paliza ocurrida en un centro comercial de Palma

El denunciante manifestó que dos hombres, al pasar cerca de ellos con su furgoneta, comenzaron a increpar y propinar golpes a su vehículo sin venir a cuento. Es más, la víctima sostiene que no conocía de nada a estas personas. Al bajar del vehículo, fue empujado y recibió un puñetazo en el brazo. Una vez dentro del establecimiento fue golpeado de nuevo. En esta ocasión fue embestido con un carro de la compra y fruto del impacto acabó tirado en el suelo.

Posteriormente, observó una serie de desperfectos en su vehículo, consistentes en roturas de elementos y raspaduras en la carrocería. Al volver al comercio solicitó al personal de seguridad acceso al circuito cerrado de seguridad, pudiendo confirmar que la agresión y los daños habían quedado registrados. Con el fin de identificar a los autores, procedió a fotografiarlos para adjuntar su imagen a la denuncia. En ese instante, los presuntos agresores, al verse retratados no dudaron en rociar a la víctima con un espray de pintura que portaban.

El juzgado receptor de la denuncia emitió un oficio facultando a la Policía Local de Palma para obtener las filmaciones de seguridad y, a ser posible, identificar a los autores. Un agente del Grupo de Seguimiento e Investigación de Denuncias (GISD) acudió al comercio y una vez obtenidas las pruebas vio que los denunciados portaban unas puertas en el carro de la compra. Mediante la colaboración del responsable de ese departamento pudieron saber con exactitud el modelo adquirido y con la revisión de las facturas identificaron a uno de los compradores.

Plenamente identificado, fue citado ante la división de Policía Judicial para tomarle declaración por los hechos y se le comunicó su condición de investigado por un presunto delito de maltrato de obra sin lesión y otro de daños, advirtiéndole de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando fuera requerido.