El joven, custodiado por dos policías, en los juzgados de Vía Alemania.

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La jueza de Instrucción 1 de Manacor ha ratificado la prisión para el padre que intentó matar a golpes a su bebé en Manacor. La magistrada sostiene en el auto que el joven reside con su pareja sentimental y la víctima y que existe «un riesgo evidente de reiteración delictiva respecto de su hijo, que apenas cuenta con un mes de vida».

Además, considera que la gravedad de la pena a la que se enfrenta por un delito de intento de asesinato determina un elevado riesgo de fuga «que únicamente puede evitarse con la adopción de la medida cautelar de prisión provisional». La jueza indica que el investigado no cuenta con un arraigo relevante como para descartar el riesgo de huida. «A la vista de su modo de vida y de que ya ha ingresado en prisión, en caso de estar en libertad, frente a ese futurible nuevo ingreso, opte por la huida».

Los hechos se produjeron durante la madrugada del pasado 19 de julio en el domicilio que el joven comparte con su pareja sentimental. La madre del pequeño salió a pasear al perro y el bebé, de 30 días, empezó a llorar. El ahora encarcelado le dio un biberón, pero no consiguió calmarlo y lo zarandeó en diferentes ocasiones, presionándole fuertemente la cabeza, el torso y otras zonas del cuerpo con ambas manos.

El joven estampó a su hijo varias veces contra el suelo. La víctima sufrió un traumatismo craneoencefálico, fracturas craneales y costales múltiples, así como graves lesiones en las piernas. Cuando la mujer regresó a la vivienda su hijo se encontraba en su cuna, aparentemente dormido. Durante la noche el neonato comenzó a llorar y al ir a cambiarlo la mujer notó la pierna sin tono muscular.

La madre del bebé preguntó a su pareja si había ocurrido algo y negó que se hubiera producido ningún incidente. La chica llamó a la abuela materna del pequeño para que lo valorara y al llegar a la casa percibió que el niño estaba amarillento. Los tres se dirigieron enseguida al hospital de Manacor, donde los derivaron a Son Espases por las múltiples lesiones y fracturas que tenía.

Desde el hospital comunicaron lo sucedido al juzgado de guardia de Palma y a los servicios de protección del menor, que realizaron una entrevista a los padres y elaboraron un informe ante las diferentes versiones que dio el padre. El joven, en el hospital, explicó que las heridas que presentaba se debían a un accidente, pero cambió su relato hasta en tres ocasiones.

Los hechos se pusieron en conocimiento del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional y los agentes abrieron una investigación. Tras numerosas gestiones y declaraciones de testigos detuvieron al joven como presunto autor de un delito de intento de asesinato. Los policías descartan la hipótesis de que el pequeño sufriera las lesiones de forma accidental.

La Policía Nacional concluye que el padre agredió de forma reiterada al bebé y le provocó diferentes lesiones de carácter grave. No supo explicar los motivos por los que le golpeó. Solo reconoció que lo hizo. Posteriormente, y tras tomar declaración a la madre del menor, los agentes de las Unidades de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) arrestaron al joven por un delito de malos tratos hacia su pareja.

El bebé estuvo diez días ingresado en el hospital Son Espases a consecuencia de las graves lesiones ocasionadas por su padre, que permanece en la prisión de Palma desde el pasado 25 de julio.