El acusado, este miércoles durante el juicio. | Alejandro Sepúlveda

TW
0

Un hombre se ha sentado este miércoles por la mañana en la silla de los acusados de la Audiencia de Palma por presuntamente apropiarse de forma ilícita de unos 16.000 palés, tasados por la acusación particular en más de 80.000 euros. En su declaración ante el tribunal, el procesado ha culpado a la empresa que le subcontrataba en la gestión y transporte de este material: «Llevan la empresa tan desastrosamente mal a nivel administrativo que para que salieran las cuentas el muerto tenía que cargarlo alguien», ha dicho.

Los hechos, tal y como describe el Ministerio Fiscal en los escritos de acusación, ocurrieron entre 2018 y 2019 cuando el procesado, propietario de una empresa de gestión de residuos y transporte, prestó una serie de servicios a otra empresa con base en Llucmajor dedicada al transporte. El trabajo consistía en la recogida, almacenaje y distribución de palés. Unos palés que a su vez eran propiedad de una tercera empresa de la Península.

Según uno de los responsables de esta última compañía, que este miércoles ha declarado ante la jueza, fueron una serie de auditorias las que alertaron de que un gran número de los palés que se recogían en diversas empresas de la Isla finalmente no llegaban a su destino, la empresa con sede en Llucmajor. Además, el responsable también ha apuntado a que todas esas recogidas habían sido realizadas por la empresa del acusado.

Por su parte, el procesado ha explicado que «en ningún momento» se apropió de nada y que sus trabajadores eran los encargados de las recogidas y entregas: «Yo la entrega la he hecho, hemos entregado todo, que yo sepa no nos hemos quedado con ningún palé. Yo confío en mi gente (sus trabajadores)».

El acusado también ha manifestado durante el juicio que la empresa que le subcontrataba, encargada de recibir finalmente los palés, «era totalmente un desastre a nivel administrativo» y que «siempre había desórdenes de palés y entregas de pedidos equivocadas».