Según el escrito del Ministerio Fiscal, el acusado empezó a abusar de su sobrina de unos diez años entre 2012 y 2014, aprovechándose de la confianza que tenía con ella y de que la menor no se atrevía a contar lo sucedido. A partir de 2016 los abusos ya incluyeron relaciones sexuales completas. Tras este largo periodo en el que se habían repetido este tipo de conductas, apunta la Fiscalía, que la menor ya no era capaz de evitar la situación y oponerse a los deseos del ahora procesado.
Finalmente, el 17 de junio de 2021 se presentó una denuncia por estos hechos. El joven fue privado de libertad durante dos días y se dictó una medida provisional de alejamiento y de incomunicación.
Al acusado se le imputan dos delitos continuados de abuso sexual a menor de 16 años que suman un total de 17 años de prisión. La Fiscalía también solicita una orden de alejamiento de 500 metros durante cinco años y una indemnización de 30.000 euros para la víctima.
