El arresto fue practicado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local de Manacor. | Alejandro Sepúlveda

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Agentes de la Policía Nacional en colaboración con la Policía Local de Manacor han detenido a un menor de edad como presunto autor de un delito de robo con fuerza en domicilio. Los dispositivos conjuntos establecidos con motivo de la comisión de robos con fuerza en el interior de viviendas del casco urbano han empezado a dar sus frutos. Sobre las diez de la mañana del pasado martes, una persona que pasaba por la calle Sant Rafael observó cómo estaban fracturando el cristal de la puerta de un domicilio de dicha vía y se introducían en el interior.

Acto seguido, los delincuentes abandonaron la vivienda portando diversos efectos en sus manos, por lo que los testigos procedieron a llamar al 091 dando aviso del hecho.La colaboración ciudadana permitió una rápida actuación policial y varias patrullas de ambos cuerpos que se encontraban de servicio de prevención de robos acudió rápidamente a esa zona para localizar a los presuntos autores del robo. Momentos más tarde, una patrulla de la Policía Local sorprendía a dos jóvenes cerca de un centro docente de Manacor, justo mientras se repartían el dinero sustraído, y al verse sorprendidos se dieron a la fuga a la carrera, pudiendo los agentes proceder a la detención de uno de ellos.

Los investigadores han logrado identificar al otro joven y se espera que en las próximas horas se proceda a su arresto. Hay que tener en cuenta que desde hace unas semanas se han cometido varios robos con fuerza en domicilios del casco urbano de Manacor. El denominador común de todos los asaltos es que los objetivos siempre suelen ser casas bajas de calles estrechas cuyos moradores justo han salido de las mismas (preferentemente personas mayores). Una vez dentro, se llevan como norma general todo el dinero y joyas que encuentran. Los investigadores tienen muy claro que las bandas de jóvenes dedicados a este tipo de asaltos vigilan a sus víctimas pacientemente hasta que abandonan las casas. En algunas ocasiones, también han actuado con moradores en su interior.