La procesada, este lunes, en una sala de lo Penal de Vía Alemania. | J.P.M.

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Un juzgado de lo Penal condenó este lunes a una mujer a un año y medio de prisión tras reconocer que intentó introducir droga en la cárcel de Palma para un familiar. La acusada, nacida en Argentina, se declaró culpable de un delito contra la salud pública. La procesada no cumplirá la pena privativa de libertad al quedar suspendida durante dos años tras el acuerdo alcanzado entre su abogada y la representante de la Fiscalía.

Los hechos se remontan al 6 de marzo del pasado año. La procesada depositó en el departamento de comunicaciones del centro penitenciario un paquete dirigido a un pariente que se encontraba en ese momento cumpliendo condena en el centro penitenciario de la capital balear. En el interior de la caja había un pantalón, al que se le cosió dos tiras de sustancia marrón compacta que resultó ser resina de cannabis con un peso de 4,579 gramos. A pesar de estar oculta en un cordón de la cintura de la prenda de ropa, la droga fue detectada por un perro de la unidad canina de la Guardia Civil. La droga tenía un precio de mercado de 29,95 euros.

Inicialmente la Fiscalía solicitaba para la imputada, que no tenía antecedentes penales, dos años de prisión.