El procesado, que se encuentra en prisión, durante la vista celebrada este pasado martes. | Juan P. Martínez

TW
9

Un juzgado de lo Penal de Palma condenó este pasado martes a un hombre, nacido en Marruecos, a un año y medio de prisión al reconocer que empujó por las escaleras del edificio donde residía a un hombre el pasado mes de mayo para robarle 800 euros. Por las lesiones ocasionadas pagará una multa de 60 euros. Ambos coincidieron en un salón de juegos de la plaza Madrid y el acusado observó cómo al perjudicado le sonrió la suerte. Y decidió seguirlo.

El imputado, que se encuentra en la cárcel, abonó 1.000 euros a la víctima antes del juicio y restan por pagarle otros 1.100 euros, que deberá hacerlo antes de diez meses. También se hará cargo de los desperfectos ocasionados en un cristal del portal donde ocurrió el asalto. El juez apreció los atenuantes de reparación parcial del daño y el de drogadicción, ya que en el momento de los hechos el acusado actuó por su adicción a las sustancias estupefacientes.

El suceso tuvo lugar alrededor de las 17.45 horas del 4 de mayo. El procesado, de 29 años, pidió dinero al hombre y este se negó mientras ambos se encontraban en un salón de juegos de plaza Madrid. Minutos más tarde el perjudicado tuvo suerte y consiguió sacar un suculento premio en una de las máquinas de azar. Poco después se marchó a casa, muy cerca de allí, y el delincuente salió tras él. Al introducirse en su portal el acusado le abordó por la espalda, le agarró por el cuello y le hizo caer por las escaleras. El hombre se golpeó con la cabeza en un cristal, que acabó fracturado. En ese momento el ahora condenado le quitó la cartera, donde portaba 800 euros. Huyó, y no solo de allí. Fue arrestado el 2 de junio en Alicante.

Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió un fuerte golpe en la cabeza, en el abdomen así como en una mano. Inicialmente el Ministerio Público solicitaba para el acusado cuatro años de prisión. Su abogado, Miguel Ángel Cardell, alcanzó un acuerdo con la fiscal antes de la vista y la pena quedó fijada en año y medio.