El incidente tuvo lugar el pasado sábado día 15. | Maria Nadal

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Un juzgado de Instrucción ha condenado en un juicio rápido a 38 días de trabajos comunitarios al hombre detenido el pasado sábado acusado de agredir a su pareja sentimental mientras se encontraba en el paritorio del hospital comarcal de Inca. Asimismo se le prohíbe comunicarse y aproximarse a la mujer a menos de 150 metros durante los próximos ocho meses y la tenencia de armas por un plazo de dos años. El arrestado, asistido por el abogado Alejandro Serra, mostró su conformidad a la pena tras al acuerdo alcanzado por su defensa con el representante del Ministerio Fiscal.

Los hechos, tal y como informó en exclusiva Ultima Hora, tuvieron lugar minutos antes de las siete de la mañana del sábado día 15. A esa hora, el personal especializado se disponía a inyectar la epidural a la mujer para ayudar al parto. La gestante se puso nerviosa y se opuso a recibir el pinchazo. Los facultativos intentaron calmar a la víctima sin éxito. En el cuarto se encontraba la pareja sentimental, de nacionalidad italiana, al igual que su novia, que al presenciar lo ocurrido solicitó a los médicos y a dos ginecólogas que se dieran la vuelta. Los allí presentes creyeron que iba a hablar con ella para tranquilizarla, pero nada más lejos de la realidad. El varón dio un fuerte bofetón a la mujer. Esto fue presenciado por dos médicos, que finalmente no se giraron cuando el hombre se lo pidió.

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Horas más tarde, avisaron al juzgado y a la Guardia Civil de lo ocurrido y una patrulla se desplazó hasta el hospital. Allí la víctima confirmó a los agentes que el futuro padre de su hijo, de 42 años, le había golpeado en la cara porque estaba nerviosa al no querer recibir la epidural. También relató que había sufrido al menos cuatro episodios de violencia doméstica en el último año. Por todo ello se decidió extremar la vigilancia a la mujer en el paritorio. Minutos después de las 21.00 horas, los guardias civiles escucharon gritos en las inmediaciones de la planta donde se encontraban.

Al abrir la puerta del pasillo vieron a un varón que coincidía con la descripción física facilitada por la denunciante. Los agentes le informaron que quedaba detenido por un supuesto delito de malos tratos. Este pasado martes, el abogado del acusado, tras dar el visto bueno a la calificación de la Fiscalía sobre lo ocurrido, vio innecesaria la celebración del juicio ante un juzgado de lo Penal de Palma por lo que se dictó sentencia de conformidad en ese mismo acto en Inca.