El objetivo es ‘cazar’ a conductores sin cinturón, usando el móvil o en acciones temerarias. | Redacción Sucesos

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La Guardia Civil de Tráfico vigila por tierra y aire a los conductores. Hace unos meses incorporó dos cuadricópteros Thyra V109 de última generación con el único objetivo de ‘cazar’ a los infractores que ponen en peligro su vida y la de los demás usuarios de la vía con acciones temerarias. Los ‘Mini Pegasus’, como así se les conoce popularmente, pesan nueve kilos y miden 71 escasos centímetros. Se han convertido en los auténticos centinelas del aire de la Guardia Civil y, de ahora en adelante, una pesadilla para los conductores infractores de Mallorca. La Agrupación de Tráfico cuenta ya con dos drones de última generación que pueden elevarse 120 metros de altura y están provistos de cámaras de alta definición que detectan las infracciones más graves de circulación. Pero las preguntas que todos los conductores se hacen son las siguientes: ¿Dónde están los drones? ¿Cuál es su ubicación?

A continuación les facilitamos las seis ubicaciones donde con mayor frecuencia podemos encontrarnos con la presencia de los ‘Mini Pegasus’ en acción. Se trata de una relación de puntos orientativos facilitados por el instituto armado, pero que también vienen reforzados con la instalación de radares fijos, móviles y la presencia de ‘Pegasus’, el helicóptero de la DGT.

Uno de los puntos elegidos de vuelo de estas aeronaves es la MA-11, la carretera de Sóller. El tramo comprendido entre Son Sardina, Palmanyola y Bunyola está especialmente controlado. Los motoristas temerarios que realizan carreras ilegales por la MA-10, carretera de la Serra también están en el punto de mira de ‘Mini Pegasus’. El cuadro de puntos de vigilancia prosigue en la MA-1110, carretera de Valldemossa, la MA-4023, vía que une Manacor y Porto Cristo y la MA-5020, de Llucmajor a Porreres. Finalmente, en la MA-13, autopista de Inca, justo a su paso en el acceso del polígono de Son Castelló de Palma, la aeronave vigila y sanciona la utilización inadecuada de los arcenes y los cambios de sentidos. Todo ello, además de vigilar el uso del teléfono móvil al volante.

Las multas oscilan entre los 500 y los 200 euros y en la carta que llega a los sancionados se incorpora una secuencia de vídeo, para que no haya la más mínima duda. Los dos cuadricópteros Thyra V109 son de propulsión eléctrica, fabricados en fibra de carbono para ser más ligeros y duros, y son una creación española. Están dotados de una cámara Sony con un zoom óptico de 30 aumentos y un zoom digital de 12. Las lentes pueden captar imágenes de vehículos que se encuentran a 5 kilómetros de distancia y fotografía los interiores de los coches en alta definición a mil metros.

La EVAT (Equipos de Vigilancia Aérea de Tráfico) son los encargados de operar con estos modernos aparatos aéreos. Hay siete en España, uno de ellos con base en Palma. Han tenido que pasar un curso específico para poder controlar los teledirigidos. Los dos drones se mueven en furgonetas de Tráfico y se transportan a una zona señalada de antemano.