Los dos acusados, este martes, en el juicio celebrado en Palma. | JUAN PEDRO MARTÍNEZ

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Un rifle, dos escopetas, un dron, numerosas joyas y 500 euros en efectivo. Este fue el botín que se llevaron dos ladrones en una casa habitada de Son Ferriol. Los dos delincuentes han sido condenados este martes por un juzgado de Palma. Uno de ellos, multirreincidente, ha aceptado dos años y medio de cárcel y el otro se ha conformado con un año y medio de prisión. La jueza de lo Penal número 5 ha tenido en cuenta las circunstancias atenuantes de drogadicción y de reparación del daño, ya que han consignado 3.000 euros para el perjudicado antes del juicio.

Las penas de prisión han quedado suspendidas con la condición de que ambos, que se encuentran presos, se sometan a un tratamiento de desintoxicación de las drogas y de que abonen lo que falta de la responsabilidad civil, 2.000 euros, en un plazo de un año. El robo enjuiciado ocurrió entre las 7.00 y las 14.00 horas del 14 de octubre del año pasado. Los acusados, de 58 y 39 años, ambos con antecedentes penales, se dirigieron a una vivienda de la Avenida del Cid de Son Ferriol y rompieron el sistema hidráulico y la cerradura de la puerta de acceso al domicilio.

Una vez en el interior, fracturaron la cerradura de una habitación y se apropiaron de las armas, joyas, un dron y 500 euros. La Policía Nacional abrió una investigación y detuvo a los dos sospechosos. Los agentes recuperaron algunas joyas que los acusados habían vendido en un establecimiento el mismo día. En el momento de su detención, los ladrones llevaban una cartera con la documentación de la víctima, un teléfono móvil, cinco relojes, diversas cadenas, pendientes, pulseras y el mando del dron. La Fiscalía reclamaba cinco años de cárcel para uno de los delincuentes y tres para el otro, pero este martes ha rebajado su petición tras llegar a un acuerdo con el abogado defensor.