Fiscalía y las defensas han alcanzado un acuerdo de conformidad antes de celebrarse el juicio en la Audiencia de Palma. | J.P. MARTINEZ

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La administradora y el gestor de una empresa constructora han sido condenados a 3 años de cárcel cada uno después de reconocer que en 2017 estafaron a un hombre para que invirtiera en proyectos inmobiliarios y que falsificaron una factura para dar credibilidad al negocio. La Fiscalía reclamaba inicialmente penas que sumaban siete años de prisión para el hombre y otros siete para la mujer por los delitos de estafa, falsedad en documento mercantil y de apropiación indebida de hasta 65.600 euros, así como el pago de una multa por 14.000 euros.

El ministerio público y las defensas han alcanzado un acuerdo de conformidad antes de celebrarse el juicio en la Audiencia de Palma, por lo que los autores confesos se han conformado con dos años de prisión por la estafa y otro año por el delito de falsedad. El tribunal ha concedido a los estafadores la suspensión de la pena de prisión, por lo que no ingresarán en la cárcel siempre que abonen los 65.600 euros en concepto de responsabilidad civil. La administradora de esta construcción y su pareja sentimental, gestor de dicha entidad, contactaron con la víctima y se presentaron como dueños de la empresa para que participara como inversor inmobiliario. «Con ánimo de obtener un beneficio ilícito y aparentando una solvencia y credibilidad empresarial de la que carecían», según la Fiscalía, los dos estafadores hicieron creer al inversor que iban a ejecutar tres contratos de viviendas en Palma y Marratxí.

De esta manera, el hombre se convirtió en copartícipe de los resultados de explotación inmobiliaria de la constructora recibiendo, además del capital que invirtiera, un 10 % mensual de la cantidad invertida. En total, habría entregado hasta 65.500 euros. La pareja de gestores no tenía intención de ejecutar ninguno de los contratos mencionados y tan solo quería apoderarse ilícitamente del dinero recibido. También elaboró una factura falsa de una partida de cimentación y estructura por 55.000 que enviaron al inversor para dar credibilidad a los negocios de la entidad.