El ‘campito’ ubicado en Son Espanyolet, se ha convertido en uno de los puntos negros de la ciudad. | MIQUEL A. CAÑELLAS

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Los vecinos de la barriada de Son Espanyolet llevan meses detrás de algún vecino que se dedica a rajar las ruedas de los coches que estacionan en las inmediaciones del aparcamiento de tierra ubicado en la parte trasera del cuartel de San Fernando de la Policía Local de Palma. Justo en las inmediaciones de las calles Llibertat y Dragonera, desde hace años hay un terreno, conocido popularmente como el ‘campito’ donde estacionan sus vehículos un gran número de residentes de la zona. Hasta el momento, hay más de 20 personas que han interpuesto denuncia policial, pero se sospecha que el número de afectados sea mucho mayor. «Hay un delincuente que se dedica a pinchar y rajar las ruedas de los coches que aparcamos en la zona. De hecho, lo hace de forma intermitente y esto dificulta que podamos descubrirle», apunta una de las víctimas.

«Hemos creado una plataforma de afectados. Estamos tomando una serie de medidas de seguridad y poniendo los hechos en conocimiento de la Policía Local de Palma para que tome cartas en el asunto. También se hace un llamamiento a la calma para que los vecinos no se tomen la justicia por su mano en el supuesto caso de localizar al autor de estos hechos delictivos», apunta otro de los afectados. Fuentes policiales consultadas por este periódico coinciden en apuntar que se trata de alguien de la barrida. «Los pinchazos se vienen produciendo siempre de madrugada y en un punto muy concreto. Además se hace en tandas de entre cinco y ocho coches por día. Los cortes se hacen de forma lateral y de esta forma obliga a los propietarios a tener que cambiar las dos ruedas delanteras del vehículo. No son simples pinchazos, requiere de forma obligada al cambio del neumático entero», concluye.

Por el momento todas las hipótesis de investigación están abiertas, incluida la de talleres de reparación y venta de neumáticos de la zona. La situación y nerviosismo en la barriada va en aumento y lamentan la falta de implicación por parte de la Policía Local y del Ajuntament de Palma para tratar de localizar al autor de esta oleada masiva de pinchazos.