La víctima fue rescatada por los Bombers de Mallorca. | R.S.

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Un vecino de Pollença, español de 70 años, apareció a primera hora de este sábado herido en el interior del todoterreno en el que viajaba tras precipitarse por un terraplén de unos 10 metros cerca del oratorio de Santa Lucía, en Mancor de la Vall. En torno a las 7.15 horas de Año Nuevo, unos cazadores de la zona escucharon a un hombre pedir auxilio. Al aproximarse, vieron un coche accidentado y a un señor mayor dentro del mismo. Rápidamente, dieron la voz de alarma y varias dotaciones de los Bombers de Mallorca, personal sanitario del SAMU-061 y la Guardia Civil acudieron en su auxilio.

A su llegada, los bomberos especializados consiguieron estabilizar el vehículo y con gran destreza rescataron al único ocupante del turismo. Las maniobras fueron muy delicadas y peligrosas dado que más de medio cuerpo del accidentado estaba colgando fuera del habitáculo y atrapado. Tras cortar parte de la carrocería, los Bombers de Mallorca lograron sacar al hombre y llevarlo hasta la ambulancia. Una vez allí, el personal sanitario lo estabilizó. El paciente presentaba golpes por todo el cuerpo y se quejaba especialmente de una de sus piernas. Acto seguido, fue trasladado de urgencia hasta el hospital. Su estado es de pronóstico reservado dentro de la gravedad de sus lesiones. Por su parte, antes de abandonar el lugar, la víctima fue interrogada por la Guardia Civil. En su relato de hechos, el septuagenario afirmó que pasó la Nochevieja en compañía de su mujer y unos amigos. Una vez que finalizó la cena, ambos regresaron a su casa, en el término municipal de Pollença. Cuando dejó a su esposa y se disponía a aparcar el coche dice que fue abordado por dos jóvenes que le secuestraron. A partir de ese instante sus recuerdos son muy borrosos. Dice que los chicos se metieron en un camino y al tratar de girar el coche se precipitó. Tras el accidente ellos se marcharon y lo dejaron solo y desatendido.

La Guardia Civil practicó la correspondiente prueba de alcoholemia al hombre arrojando un resultado de 0,0.Tampoco se le percibe ningún tipo de enajenación mental ni consumo de sustancias estupefacientes. Los investigadores se entrevistaron con las religiosas del oratorio que confirmaron que durante la Nochevieja fueron varias las personas que practicaron botellón en la zona. Junto al coche se hallaron numerosas botellas y restos de botellón.