El suceso conmocionó a Esporles y a la Isla entera en verano de 2017. | Alejandro Sepúlveda

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La Fiscalía consideraba que la dueña del albergue no tenía responsabilidad alguna en lo ocurrido el 26 de junio de 2017. Ese día una niña de 15 años, que se encontraba pasando las vacaciones en un hostal de Esporles, junto a su madre y a su hermano, también menor, perdió la vida al caerle encima parte de una columna en el patio del albergue. En el momento del trágico suceso se encontraba tumbada en una hamaca.

Casi cuatro años y medio después de lo ocurrido, la acusación particular y la defensa de la propietaria alcanzaron un acuerdo y la mujer se declaró culpable en un juzgado de lo Penal de Palma de un delito de homicidio por imprudencia leve y abonará una multa de 180 euros. El seguro ya indemnizó a la familia por el fallecimiento de la chica. El siniestro ocurrió a las 15.35 horas del 26 de junio, un día después de que la joven junto a su hermano y su madre llegasen a Mallorca procedentes de la Península.

Los tres se dirigieron al patio del hostal y se acomodaron en dos hamacas. Los menores en una y la mujer en otra. Las tumbonas se encontraban ancladas mediante mosquetones a dos columnas de marés, una de ellas a una columna exenta del patio y la otra a una de carga del pórtico que había en el lugar. Los chicos se balancearon en la hamaca, hasta que en un momento dado el niño salió despedido hacia el suelo y colapsó la columna de apoyo, que acabó quebrándose e impactó sobre la chica provocándole la muerte. El ministerio público sostenía que la citada columna de marés era de buena calidad y se encontraba en buen estado de conservación. Durante la vista también se acordó que se indemnice al hermano de la víctima en 5.520 euros por las lesiones y el daño moral. La jueza dictó sentencia ‘in voce’.