Momento en el que la funeraria traslada el cuerpo sin vida de la mujer alemana pasadas las tres de la tarde. | Michel's

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La Policía Judicial de la Guardia Civil pasó todo este miércoles investigando la muerte en extrañas circunstancias de una mujer alemana que vivía sola en un chalet pareado de Peguera. El cuerpo apareció con algunos golpes y los agentes trataban de aclarar si se trató de una caída accidental o de un homicidio. La autopsia que se practicará hoy será clave.

Al parecer, fueron los vecinos los que detectaron que la puerta estaba abierta y que no se tenían noticias de la señora, de unos 60 años, y que residía sola en un chalet pareado de la calle Pou, a la altura del número 12-A.

Cuando una patrulla acudió a esa dirección se encontró el cuerpo sin vida de la mujer en el interior de la vivienda, con algunos traumatismos en el cuerpo, por lo que el caso pasó de inmediato a manos de la Policía Judicial y del Laboratorio de Criminalística, que se personaron en la casa junto a un capitán de la Benemérita, para iniciar las pesquisas.

Traumatismos

La víctima presentaba algunos traumatismos y poco después llegaron a Peguera la jueza Esther Domene y la forense de guardia, que presenciaron la inspección ocular de los guardias civiles y analizaron el escenario. Las dos principales hipótesis que se barajaban a esa hora eran una muerte accidental por una caída o un homicidio. Sin embargo, esta última hipótesis fue perdiendo fuerza a medida que avanzaban las pesquisas aunque al cierre de esta edición fuentes judiciales indicaron que era necesario esperar al resultado del examen forense para aclarar la causa de la muerte.

Pasadas las tres de la tarde, casi cinco horas después de que se dispararan todas las alarmas por la aparición del cuerpo sin vida, la empresa funeraria retiró los restos mortales de la vecina alemana de Peguera y los trasladó hasta el instituto anatómico forense. El enorme despliegue policial en la calle Pou, normalmente tranquila, causó expectación entre los vecinos: «Nos han dicho que una señora de un chalet ha aparecido muerta, pero no sabemos nada más. No para de llegar guardias civiles», contó una residente.

Otro vecino explicó que la fallecida había quedado viuda hacía unos años y que vivía sola en el chalet pareado. Los agentes preguntaron por la zona si alguien había visto o escuchado algo extraño durante la noche o en las últimas horas. Hoy se aclarará el misterio de su muerte.

El apunte

Dormía con la puerta abierta para que pudieran entrar sus gatos

Al parecer, la puerta de la casa de la señora estaba abierta, pero esta circunstancia podría tener una explicación: no la cerraba para que los gatos pudieran volver al interior a cualquier hora. Los investigadores se entrevistaron con los vecinos que tenían más trato con la fallecida para conocer con exactitud cuándo fue la última vez que la vieron con vida y quién frecuentaba su casa.