Momento en el que el personal sanitario introduce a los heridos en el atropello en la ambulancia. | Redacción Sucesos

TW
9

Una mujer de 53 años permanece ingresada en la UCI de Son Espases en estado crítico tras ser atropellada por un conductor ebrio en la barriada de Santa Catalina. En ese mismo accidente también resultó herido su pareja, un hombre de 56 años.

Según información policial, los hechos se produjeron a las 23.50 horas en la calle Espartero, a la altura del número 19. Unos instantes antes, por causas que se desconocen y que están siendo investigadas, un ciudadano español de 63 años que circulaba a bordo de un todoterreno bajo los efectos del alcohol, perdió el control del vehículo, se subió a la acera y arremetió contra una pareja que caminaba tranquilamente por la zona. También se llevó por delante una farola.

Los testigos presenciales consultados por Ultima Hora confirman que vieron al coche subirse a la acera a gran velocidad. Se sospecha que el conductor se quedó dormido por la ingesta de alcohol que llevaba en el cuerpo. Los peatones se percataron de la presencia del turismo y comenzaron a correr para protegerse.

Noticias relacionadas

El hombre pudo refugiarse tras una farola, pero la mujer fue alcanzada de lleno por el coche. El vehículo golpeó con tal fuerza a la mujer que salió despedida unos quince metros.

Auxilio

Rápidamente, agentes de la Policía Local de Palma, Cuerpo Nacional de Policía y una ambulancia medicalizada del Servei d’Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) acudieron al lugar para auxiliar a las víctimas. Una vez allí, los servicios sanitarios atendieron de urgencia a los heridos. La peor parte se la llevó la mujer que permanecía en el suelo inconsciente y sangrando de forma abundante. Su pareja también estaba en el suelo pero sus lesiones son de menor gravedad. Ambos fueron trasladados de urgencia hasta el hospital de Son Espases.

La mujer entró en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde permanece en estado crítico. El conductor fue sometido a la correspondiente prueba de alcoholemia, cuadriplicando la tasa permitida. El hombre arrojó un resultado de 0,98 por lo que fue detenido y acusado de un delito contra la seguridad vial y otro de lesiones imprudentes.