El joven, de 17 años de edad, desde hace algún tiempo tiene un serio problemas con las drogas. Fuentes próximas al caso sostienen que el chico acudió a su padre para que le diera dinero. Cuando su progenitor se negó de forma tajante, el adolescente se enfureció y la emprendió a golpes.
Agresión
En un momento dado, el padre recibió un aluvión de puñetazos y patadas con una fuerza inusual. El menor estaba totalmente poseído y fuera de sí. Varios vecinos de la zona que presenciaron los hechos llamaron a los equipos de emergencia. A su llegada, la Policía Local y la Guardia Civil tuvieron que emplearse a fondo para conseguir controlar al menor, que se encontraba visiblemente alterado y muy violento.
De hecho, tuvieron que reducirle con el uso de la fuerza estrictamente necesaria. Una vez esposado, el sospechoso fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil. La Fiscalía de Menores fue informada del suceso.
El progenitor, que presentaba lesiones de consideración por el cuerpo, fue trasladado a un centro hospitalario para recibir la asistencia médica.
A partir de este instante se inicia un proceso judicial donde la Fiscalía de Menores podrá dictar una orden de alejamiento del menor conflictivo del domicilio familiar.
9 comentarios
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Una de las causas actuales,creo,es que nuestros adolescentes saben que están protegidisimos e incuestionados.No estoy diciendo, ni mucho menos, que un menor no se merezca la mayor protección posible y absoluta por parte de toda la sociedad .Quiero decir mas bien que sus denuncias y actuaciones tienen que estar investigadas y cuestionadas,mas en casos que no exista prueba alguna para actuar contra los padres.Un Director de Instituto,alguno en cuestión, puede incoar un registro de mal trato infantil contra los padres, simplemente por una denuncia verbal del adolescente carente de prueba alguna.El Director en cuestión se lava las manos y no se complica el turno de 8 a 15 horas.El menor asume un protagonismo desproporcionado y los padres quedan desactivados.Si a todo esto añadimos el silencio y complicidad de la Conselleria de educación,ya tenemos una bomba de relojería activada.Este tipo de problemas requiere un esfuerzo,generosidad y amplitud de miras por parte de toda la sociedad y no solamente por parte de los sufridos y malheridos padres.
¿Fiscalía de Menores? Este individuo hace años que dejó de ser un menor…
Pobres pares. De vegades me queix des meus fills, però en realidat he de donar gràcies a Déu de que no siguin així com aquest monstre. Esper que es recuperi es pare, de sa brutal pallissa.
Un yonki con mono no es una persona. El problema no es que pegara a su padre, el problema es haber caído en las drogas de un modo que haces absolutamente cualquier cosa por un chute. A los chicos hay que vigilarlos y atarlos en corto todo lo que se pueda sin que dejen de vivir la vida, pero algunos hay que estar muy pero que muy encima porque es casi imposible. Yo he visto casos en el que realmente no se puede acusar para nada a los padres de dejadez y aún así fue imposible. Tengo unos amigos que su hija después de una vida entre algodones les echaba en cara que no le hubieran dado una hos*ia a tiempo ¿te puede decir algo peor un hijo? Nuestros políticos no dudo en que liberalizaran ciertas drogas a medio plazo. Se podrán tomar porros y estimulantes sin problema, pero eso sí, no pases de 30 km/h. Eso salva vidas.
Cada día estoy más contenta de no tener hijos
Un payo le pega una paliza a su padre por qué no le da dinero que gentuza más grande son los payos que os gustaría este comentario para que veáis que los payos los gitanos los moros los chinos todos hay buenos y malos basta ya tanto racismo cuando hay una noticia de un payo no pasa nada y cuando hay noticia tu gitano le llamáis de todo gentuza de soy gentuza es malo
En realidad, es lo mismo motivo y actitud que el moro que mato a su mujer y a sus hijos. Esta vez como es su padre no lo convertirán en violencia de género. Pregunta, si hubiera sido la madre lo seria?
Y ahora un tiempo encerrado y cuando este desintoxicado una buena manta de hostias y a trabajar, así se le bajan los humos y la tontería
Qué pena, pobres padres. No quiero saber cómo de destrozados deben estar. Un hijo al que has querido, protegido y mimado más que a ti mismo, de repente un monstruo irreconocible, hay algo peor?, como padre les deseo mucha fuerza y ánimo.