Desde hace meses, la tensión entre los clanes gitanos y africanos que controlan la venta, distribución y entrada de droga en la zona ha ido en aumento. El pasado día 16 de marzo, a las 10 horas, en una terraza de un conocido bar de la calle Francesc Julià se produjo un altercado entre un español, integrante de un conocido clan gitano, y un africano.
En ese momento, una decena de personas de etnia gitana golpearon con palos, cadenas y con un machete al nigeriano dejándolo gravemente herido y tirado en el suelo. Ese día, un fuerte dispositivo policial acudió al lugar y separó a las dos partes en conflicto mientras una ambulancia del SAMU-061 atendía al herido y lo trasladaba al hospital.
En el momento que llegó la policía había más de medio centenar de personas en las calles y la tensión racial podía palparse en el ambiente. El martes, a las 18 horas, la víctima de la agresión identificó a uno de sus agresores en el interior de un bar de la barriada. En ese momento, un gran número de policías se personaron en el establecimiento y procedieron a la detención de dos de los cabecillas de la brutal agresión. A partir de ese instante se desató la ira entre los familiares de los arrestados recriminando a los «morenos» que habían roto el pacto de no agresión sellado hace varios años. «Lo habéis roto y vais a pagar por ello. Esto es una guerra», gritaban algunos de los miembros del clan gitano. Durante toda la noche, la Policía Nacional mantuvo unidades de seguridad ciudadana en la zona. UPR (Unidad de Prevención y Reacción), GOR (Grupo Operativo de Respuesta), los ‘zetas’ e incluso una dotación de ‘Rayos’, motoristas. Durante varias horas se vivieron momentos de calma tensa pero no se produjeron incidentes.
A partir de este momento, la policía intensificará su presencia en la zona y aplicarán la tolerancia cero con todas aquellos que provoquen o se vean implicados en las peleas.
Los subsaharianos ya controlan por completo la venta de droga en las calles
Las mafias africanas que dirigen el narcotráfico en la barriada de Son Gotleu han arrebatado el poder de la venta de sustancias estupefacientes a los clanes gitanos en Son Gotleu. Fuentes policiales especializadas en drogas han confirmado a Ultima Hora que, a pesar de no existir un control absoluto, nos encontramos ante la realidad de que la entrada, distribución y venta de las grandes partidas de cocaína, heroína y marihuana ya están en manos de las grandes familias africanas de la droga. Los subsaharianos ya controlan por completo las calles y plazas, la mayoría de los bares y los locales (locutorios, peluquerías, etc.).
15 comentarios
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En Son Gotleu ya solo faltan las triadas, y no es descartable que lleguen, ya que solemos importar lo mejorcito de cada país.
El que de verdad piense que esto es a causa de racismo, inmigracion irregular, garetos, drogas, etc etc, està muy equivocado, esto es una cuestion de Educacion, he vivido en Son Gotleu y puedo decirles que hay un nivel de civismo que no conoce de razas ni nacionalidades, tirando pa Africa, sin ofender a nadie que yo soy de ahi. Enfoquemonos primordialmente en educarles antes que todo, antes de criticarles, antes de darles ayudas que no sabràn aprovechar para incorporarse al mercado laboral, incluso hasta integrarse socialmente, que no se lo pongamos tan facil, pero sin trincheras.
Son Gareto padece de un sindrome, arbol que nace torcido....!! Lo peor de todo??? Lo solucionamos pagandole jugosos salarios a jardineros para que cuiden el cesped alrededor de dicho arbol, y con eso nos conformamos. Polos y Cuxillos
Y que tal si en lugar de tener a la policía pendiente de que no se peleen, se dedican a detener a los traficantes? Que se peleen lo que quieran y luego vaya emaya a recoger los restos.
Los gitanos como siempre demostrando su cobardía en grupito, espero que paguen por ello
Entre "clanes" por un lado y "castas" por el otro el ciudadano de a pie anda absorto. Bueno, desde que la no casta de Podemos está dentro parece que no es tan importante lo de las "castas". A ver si la solución sería convertir los "clanes" en "castas" y al estar todos dentro calladitos y conformados con la función de "garrapata" y todos contentos, menos el ciudadano que paga impuestos crecientes.
Y yo pensando que los únicos racistas del mundo eran los hombres (que no las mujeres) blancos y heterosexuales.
Cuantos emprendedores hay en Palma.
Gente de todas las clases consumen drogas. Ésos son los auténticos culpables del narcotráfico. Lo demás son daños colaterales.
Y los políticos se dedican a cambiar el nombre de las calles, claro... así arreglarán el problema de la criminalidad de las calles..