Aficionados de la grada mallorquinista durante el derbi de 2017 en el Estadio Balear.

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Los cuatro ultras del Real Mallorca acusados de agredir a un grupo de aficionados del Atlètic Balears tras un derbi en 2017 han sido absueltos. El juez considera que no ha quedado acreditada la participación de los cuatro procesados en los hechos denunciados por una joven. La sentencia declara probado que el 2 de septiembre de ese año la denunciante acudió al encuentro disputado en el Estadio Balear.

Después del partido, la mujer y otros seguidores del ATB se dirigieron a cenar y a tomar algo a un bar de la plaza Sant Francesc Xavier de Palma, situada a unos 10 minutos del campo de fútbol. En un momento dado irrumpieron en la plaza una quincena de aficionados del Real Mallorca y comenzaron a lanzar botellines de cerveza a los hinchas del equipo contrario, entre los que se encontraba la joven.

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Los seguidores del conjunto mallorquinista rodearon a los hinchas del Atlètic Balears y comenzaron a agredirles. La mujer sufrió diferentes lesiones en el muslo, la rodilla y el tobillo, así como en el abdomen, que tardaron 15 días en curar.

El juez indica en el fallo que es importante señalar que han trascurrido más de tres años desde que tuvieron lugar los hechos y que la denunciante y un testigo solo reconocieron a dos de los investigados, «pero en ninguno de los dos casos la identificación se hizo con total seguridad». El magistrado de Instrucción número 3 de Palma apunta que no hay discusión acerca de que la denunciante fue agredida y que presentó lesiones.

Sin embargo, la mujer «exteriorizó dudas al reconocer a los agresores». No existen otros testimonios ni grabaciones de lo ocurrido. Los denunciados no fueron identificados por la policía en el lugar donde se produjeron los hechos ya que cuando los agentes llegaron los agresores habían huido.