Las cámaras de seguridad del supermercado Bip Bip de Son Rapinya registraron el momento del atraco el pasado lunes. | Policía Nacional

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El atracador del supermercado Bip Bip de Son Rapinya llevaba en su coche seis bridas negras entrelazadas, dos sueltas y un paquete. Bajo la rueda delantera de su vehículo se encontraron los dos teléfonos móviles que había sustraído a dos trabajadoras.

El Grupo de Atracos de la Policía Nacional sostiene que el asaltante planeaba el golpe desde hacía tiempo y su intención era atar con bridas a los empleados del establecimiento que atracó a punta de pistola. Los investigadores creen que el hombre, de 32 años y nacionalidad española, tenía conocimiento del número de trabajadores que había a la hora del cierre del negocio.

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El juez de Instrucción número 8, que el martes se encontraba en funciones de guardia, decretó su ingreso en prisión. El magistrado considera que existe riesgo de fuga por las elevadas penas a las que se enfrentará por estos hechos. Además, con esta medida se evitará que agreda o amenace a los trabajadores del supermercado y, sobre todo, que vuelva a delinquir. El presunto atracador cuenta con un total de 10 folios de antecedentes penales, la mayoría por delitos contra el patrimonio. El abogado defensor del sospechoso acreditó a través de informes que su cliente sufre una gran adicción a las drogas desde hace años, así como trastornos mentales derivados del consumo abusivo de tóxicos.

Las cámaras de seguridad del supermercado, instaladas por la empresa AR Sistemas, registraron el atraco ocurrido el pasado lunes a las 22.38 horas. El asaltante vestía una chaqueta blanca con capucha y encañonó a los empleados con una pistola de aire comprimido que se rompió al fracturar los cristales del establecimiento.