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Un hombre de 28 años ha sido detenido por la Policía Local de Málaga como presunto autor de los delitos de violencia en el ámbito familiar tras amenazar supuestamente con armas de fuego a varios familiares de su mujer para llevarse a la fuerza una hija que tienen en común.

Su pareja, de 22 años, también fue detenida por los agentes acusada de un delito de tenencia de armas después al ser localizada un arma de fuego en la vivienda que admitió que era de su propiedad, según ha informado este martes la Policía en un comunicado.
Los hechos ocurrieron sobre las 15.00 horas del 20 de noviembre, cuando varias dotaciones de la Policía Local se desplazaron al lugar tras recibir un aviso de que había una reyerta en la vía pública.

En la vivienda convivía la pareja con dos hijos, además de varios familiares de la mujer y, al parecer, a raíz de una discusión conyugal, el hombre quiso llevarse por la fuerza a una hija y al intentar impedírselo, mostró dos pistolas a todos.

El joven supuestamente amenazó con liarse a tiros si no le daban la niña, lo que hizo que se asustaran y salieran a la calle, donde supuestamente los siguió, sacó dos pistolas y los volvió a amenazar con vaciar el cargador a todo el que se le acercase, según denunciaron a los agentes.

Al percatarse de la llegada de la Policía, se metió en el domicilio, por lo que los agentes llamaron reiteradamente a la puerta hasta que lograron convencerlo para que saliera de la vivienda.

La mujer, que también estaba en el interior, permitió que los agentes accedieran al domicilio, donde los policías localizaron entre unas bolsas de plástico que había en el suelo de una habitación un arma corta semiautomática con apariencia de ser real, que dijo que era suya, motivo por el que fue detenida.

Las indagaciones llevaron a los agentes hasta otra vivienda del bloque que al parecer también regentaba el detenido, donde descubrieron lámparas, transformadores y útiles para el cultivo de marihuana, además de una bolsa de plástico llena de cogollos de la citada sustancia.

Tras la detención de la pareja, dos unidades de la Policía quedaron custodiando la entrada a ambas viviendas a la espera de que la Policía Nacional llevase a cabo una inspección más exhaustiva.