El acusado, que se encuentra en prisión por otros hechos, en un juzgado de Palma. | Juan P. Martínez

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R.J.L. conducía la noche del 3 de septiembre de 2018 un Mercedes que acababa de robar en un rent a car. Lo hacía bajo la influencia de nada menos que cocaína, cannabis, anfetaminas, opiáceos y ansiolíticos. Circulaba por la Ma-30, en Palma, invadió el carril contrario e impactó frontalmente a gran velocidad contra un conductor que circulaba de manera correcta.

Este martes, el imputado, que se encuentra en la cárcel por otros asuntos, reconoció los hechos y aceptó en un juzgado de lo Penal de Vía Alemania cuatro meses y medio de prisión y la retirada del carnet durante dos años y medio.

Robo

El procesado, tal y como relata el ministerio fiscal en su escrito de acusación, sustrajo el vehículo de un solar que una empresa de rent a car posee en la carretera de Llucmajor. No tenía ni matrícula. Con él circuló varios kilómetros hasta que chocó frontalmente con el Skoda del perjudicado en el kilómetro 3,500 de la Ma-30. Este sufrió una cervicalgia y dorsalgia y estuvo impedido durante dos meses. El coche de la víctima quedó destrozado.

El procesado abandonó el lugar dejando allí el vehículo robado. Poco después fue detenido. Horas más tarde, ya en el hospital de Son Llàtzer, fue sometido a análisis de sangre y orina. Había consumido la noche del siniestro cocaína, cannabis, anfetaminas, benzodiacepinas y opiáceos. En un principio el acusado se enfrentaba a de medio año de cárcel y tres sin carnet. Tras un acuerdo de conformidad entre las partes, vio rebajada la pena.