El imputado, a su llegada a los juzgados de Vía Alemania horas después de ser detenido. | Alejandro Sepúlveda

TW
4

Un hombre afronta una pena de cinco años de cárcel por intentar quemar vivo al dueño de un local de tatuajes de Magaluf en septiembre del pasado año, después de que este se negara a darle 30 euros. Ante la negativa del empresario, el atacante amenazó con matarlo y estuvo a punto de cumplir su propósito. El imputado, que se encuentra en prisión preventiva desde entonces, está acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa.

La víctima, que pudo zafarse del agresor tras un forcejeo, sufrió heridas en la cabeza, en una mano y en el antebrazo izquierdo. Y tuvo suerte, ya que el delincuente llegó a rociarle con gasolina en la cara y en el cuerpo, pero no pudo llevar a cabo su macabra idea.

Punta Ballena

Noticias relacionadas

Los hechos tuvieron lugar a escasos metros de Punta Ballena, concretamente en la calle Pinada. Según el relato de la Fiscalía, el acusado entró en el establecimiento sobre las 00.00 horas del 20 de septiembre de hace ahora un año. Una vez en el interior le exigió al dueño que le diera 30 euros y este se negó. El rechazo no le gustó al hombre, que le dijo al empresario que volvería al lugar «para matarte». Y casi lo hace.

El imputado acudió a una estación de servicio y llenó una botella de 75 cl. de gasolina y regresó a la tienda. Nada más llegar echó el líquido inflamable a un panel de madera y le prendió fuego. Acto seguido se abalanzó sobre la víctima y le vertió gasolina por la cara y el cuerpo y con un mechero en la mano pretendía quemarlo.

El arrojo del empresario, que pudo derribar al agresor y forcejear con él en el suelo, le salvó de salir gravemente herido. Finalmente los daños se limitaron a un hematoma en la cabeza, y contusiones en una mano y en el antebrazo izquierdo.

Una patrulla de la Guardia Civil que estaba en Punta Ballena detuvo al hombre, que se encuentra en prisión desde que ocurrieron los hechos. El ministerio fiscal pide para él cinco años de cárcel y el pago de 960 euros de multa. El acusado, de nacionalidad española y 41 años de edad, será juzgado en las próximas semanas.