El acusado, durante la vista celebrada en un juzgado de Palma. | Guillermo Esteban

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Un hombre ha sido condenado al pago de una multa de 540 euros por insultar gravemente y amenazar a dos guardias civiles que pararon a su amigo en un control de alcoholemia en Calvià. El hombre, de nacionalidad española, se declaró culpable y aceptó la pena impuesta, a la que se llegó tras un acuerdo de conformidad entre las partes antes de la celebrarse la vista.

Los hechos se remontan a la tarde del 3 de diciembre de 2018. La Guardia Civil y la Policía Local de Calvià establecieron varios controles de alcoholemia en distintos puntos del municipio de Ponent. En uno de ellos, tal y como se relata en el escrito de acusación pública, pararon a un vehículo, donde el imputado iba de copiloto. Los agentes realizaron la prueba varias veces al conductor, ya que no la llevaron a cabo de manera correcta, y esto puso nervioso al acusado. En un momento dado se dirigió a un guardia civil le dijo «la vais a hacer tantas veces hasta que salga positiva».

El funcionario al ver su actitud, cada vez más nerviosa, le dijo que se calmara. Y lejos de hacerlo siguió refiriéndose a ellos con desprecio. «Los policías sois unos mierdas», soltó. Instantes después amenazó gravemente a un agente: «Ya te pillaré a ti sin uniforme, eres valiente simplemente porque vas uniformado pero cuando te encuentre por la calle te voy a matar», dijo. Tras esto se acercó a él y le empujó con fuerza en el pecho.

El imputado, defendido por el abogado Iván García, se enfrentaba inicialmente a una pena de un año de prisión por estos hechos, calificados inicialmente como atentado por la Fiscalía pero que quedaron fijados como un delito de resistencia tras el acuerdo entre las partes.