El acusado, custodiado por una policía, en el juicio. | Juan P. Martínez

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Un hombre ha sido condenado a 11 años de cárcel por abusos sexuales a su hijastra menor de edad en Llucmajor. El acusado, de 57 años y nacionalidad española, deberá indemnizar a la víctima con 30.000 euros por los daños morales ocasionados.

Un tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma declarad probado que el hombre residía con su pareja y las dos hijas menores de edad en la mujer desde 2011 en Almendralejo (Badajoz). El procesado, desde el año 2012, realizó tocamientos a una de las niñas hasta que cumplió 13 años. En febrero de 2016, según recoge la sentencia, la familia se trasladó a vivir a Mallorca.

El hombre mantuvo relaciones sexuales con su hijastra en numerosas ocasiones hasta septiembre de 2018. La noche del 28 al 29 de ese mes, el acusado fue a la habitación donde dormía la menor y le realizó varios tocamientos, le quitó la ropa y la forzó.

La niña, a raíz de estos hechos, sufre una pérdida de confianza generalizada, aislamiento afectivo, falta de sueño y alterna estados depresivos con un comportamiento irritable.

El hombre declaró en el juicio que tuvo relaciones consentidas cuando ella tenía 16 años. La víctima, a través de una videoconferencia, confirmó los abusos sexuales. «La menor ha sido muy clara al relatar una situación que se inició con tocamientos en la casa de Almendralejo cuando ella tenía 10 años y que se incrementó a partir de los 13 con penetraciones vaginales».

Los jueces dan total credibilidad a la perjudicada. «El tribunal no tiene ninguna duda de que la sintomatología que presenta es consecuencia de la acción del acusado».