Familiares y amigos de la pequeña Naia, en el colegio La Salle, el pasado septiembre. | Alejandro Sepúlveda

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Naia Sans falleció por una reacción alérgica después de tomar un sándwich de helado de nata, que contenía proteína de leche de vaca, en el comedor del colegio La Salle de Palma. Tenía 4 años. Los forenses han concluido en un informe de 41 folios que la menor murió a consecuencia de una reacción alérgica.

Los médicos Mariona Antich y Juan Luis Poncela, del Instituto de Medicina Legal de Palma, indican en el documento que la auxiliar de enfermería del centro escolar debería haberle puesto una inyección de adrenalina antes de llamar al 061.

Sándwich de helado

Los hechos tuvieron lugar el 24 de mayo del año pasado. Naia, según fuentes jurídicas, preguntó varias veces si podía tomar el sándwich de helado de nata de postre. Era alérgica a la proteína de la leche de vaca, pero la responsable del comedor de los alérgicos, dijo que sí. La niña empezó a encontrarse mal y se desplomó. Los profesores dieron aviso a los servicios de emergencias y varias ambulancias se desplazaron hasta el colegio en cuestión de minutos.

La menor sufrió un shock anafiláctico, entró en parada cardiorrespiratoria y una médica del 061 intentó estabilizar sus constantes vitales durante más de una hora, pero no consiguió salvarle la vida. Eran las 13.48. No había pasado ni una hora desde que tomó el helado.

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Los facultativos destacan que el personal del centro educativo no está cualificado para este tipo de actuaciones por una serie de motivos. La auxiliar de enfermería tendría que haberle inyectado la adrenalina porque así figura en el plan que firmaron los padres de la menor y el colegio. La niña llevaba una tarjeta sanitaria colgada del pecho en la que señalaba que sufre alergia mortal a los lácteos. Además, en la mochila portaba una jeringuilla de adrenalina con las instrucciones ante la sospecha de sufrir un shock anafiláctico.

La llamada de la auxiliar al 061 quedó grabada y ha sido aportada a la causa. La mujer, según sostienen los dos médicos forenses que ha elaborado el informe, no supo interpretar que la niña se estaba asfixiando.

Un juzgado investiga por homicidio por imprudencia grave a cuatro mujeres: la encargada del comedor de los alérgicos, la camarera que le dio el helado, la auxiliar de enfermería y la doctora del 061.

«Le dieron un alimento que no podía comer»

La madre de Naia Sans publicó un texto de despedida a su hija en su cuenta de Facebook. «Todo se truncó al mediodía... no hablaré de las personas presuntamente implicadas, pero sí os diré que a mi hija le dieron un alimento que NO podía comer».

Los abogados Daniel Castro y Manuel Ponce asisten a la familia de la víctima en este trágico suceso que se produjo el 24 de mayo de 2019.