Manuel ‘Mangote’ es el sobrino del detenido y nada más ocurrir los hechos acudió al parque de Son Peretó, para intentar hablar con su tío, que ya estaba rodeado de policías. ‘Mangote’ explicó que es el tutor legal de ‘El conguito’, ya que éste tiene una discapacidad mental diagnosticada y negó que fuera él el agresor: «Mi tío estaba durmiendo, no ha sido él».
■ Vuelco en el caso de la indigente: investigan si se quemó por accidente
Sobre el hecho de que tuviera hollín en las manos, fue tajante: «Ese es que no se lava nunca». «Si encuentran cosas quemadas en la casa tiene un explicación: mi tío no tiene luz, así que enciende velas y algunas están quemadas».
El joven relató que hace unos dos años una ex abogada y un toxicómano atacaron a ‘El conguito’ y María Ángeles, al parecer para robarle, pero se defendieron y al final acabaron ellos también condenados.
‘Mangote’ contó que su tío y la mujer quemada sufren alcoholismo y descartó de forma tajante que fueran pareja: «Si le quieren meter violencia de género se equivocan, porque no eran novios. Ella venía de vez en cuando, pero no eran pareja. Era una mujer maltratada, la han agredido en muchas ocasiones para quitarle el dinero y yo la he visto con el ojo morado, pero eso no lo hacía mi tío». Asimismo, Manuel opinó que el acusado «es inimputable, porque es un discapacitado mental. De hecho, yo soy su tutor legal».
Vecinos de la zona contaron que los dos indigentes discutían con frecuencia y que bebían vino y alcohol en el parque de Son Peretó. Se emborrachaban con frecuencia. La mujer no estaba en ninguna lista policial de mujeres maltratadas.
El alcohol
Hace un año
El alcohol, dos palabras que silenciosamente desestructuranan física y mentalmente al consumidor y a los allegados por las actuaciones conscientes o inconscientes de los enfermos y que tan daño hacen. La Administración no está preparada para enfrentarse a las situaciones familiares afectadas por ese consumo. Los familiares nos sentimos desamparados ante situaciones extremas ya que la única solución ofrecida ante la violencia verbal es la denuncia. Son enfemos que no aceptan su enfermedad y no se dejan ayudar mientras los otros sufrimos sus humillaciones que acaban con cualquier persona sana.