Varios agentes de la Guardia Civil de Tráfico realizan un control en una carretera de Mallorca. | Alejandro Sepúlveda

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Un juzgado de lo Penal de Palma condenó este miércoles a un hombre a medio año de prisión por un delito de conducción temeraria. El acusado, de nacionalidad española y 33 años de edad, escapó de un control de alcoholemia, intentó arrollar a dos guardias civiles y escapó saltándose varios semáforos en rojo y en dirección contraria en una travesía de Llucmajor. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 11 de agosto del pasado año.

El imputado, defendido por Eduardo Valdivia, reconoció los hechos y aceptó la condena, a la que se llegó tras un acuerdo de conformidad entre las partes. Además de la pena de prisión, que no cumplirá al quedar suspendida, no podrá conducir vehículos a motor durante 15 meses y tendrá que pagar una multa de 900 euros.

El suceso tuvo lugar minutos antes de las 4.00 horas. El hombre conducía su Audi A3 por la carretera MA-19 cuando a la altura de la rotonda del Pil·larí fue requerido por dos agentes de la Guardia Civil que realizaban un control preventivo de alcoholemia. Lejos de aminorar la marcha, el acusado aceleró, obligando a los beneméritos a saltar para no ser arrollados. En ese momento se inició una persecución.

El imputado se dirigió en sentido contrario a la circulación en las inmediaciones del polígono de Son Noguera. Dentro del casco urbano, los guardia civiles le dieron alcance cerrándoles el paso. Y ni con esas. El conductor kamikaze dio marcha atrás y siguió con su plan de no detenerse e inició la marcha en sentido a Campos a gran velocidad invadiendo la mediana y saltándose varios semáforos en rojo. Finalmente acabó en el camino de Son Marrano y en una curva perdió el control. Quedó a las puertas de una finca y las derribó con el vehículo. Logró escapar. Cinco días después fue detenido.

La Fiscalía, tras alcanzar un acuerdo con las partes, rebajó su petición inicial y fijó la condena en seis meses de cárcel, que quedó suspendida, y el pago de una multa de 900 euros.