El padre, junto a su hija, en una foto tomada este verano, se defiende de las acusaciones.

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El presunto caso de secuestro parental de una bebé de diez meses ocurrido el pasado día 4 de Felanitx sigue sin resolverse. A la espera de que un juez decida sobre el asunto, el padre denunciado ha querido salir al paso para defender su postura. Lo ha hecho a través de su abogada, Neus Ortega. «Él no es ningún secuestrador, lo único que quiere es proteger a su hija», sostiene la letrada.

A pesar de la denuncia puesta por la madre en un juzgado de Manacor, Ortega afirma que «no ha habido delito alguno. La Guardia Civil no ha intervenido más que en comprobar que la niña se encuentra en perfecto estado con su padre», señala.

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Quien también se ha ocupado de comprobar cómo está la bebé ha sido Servicios Sociales del Consell de Mallorca, a los cuales el padre ha informado en todo momento de su situación.

Tras dar fe de que la menor se hallaba en el estado idóneo, decidieron, como días antes hizo la Benemérita, no interferir en este conflicto entre los padres. La abogada recuerda que días antes de iniciarse este conflicto, su cliente denunció a la madre por coacciones. El padre declaró ante la Guardia Civil de Santanyí, el 30 de agosto, que su exmujer le amenazó con acusarle de maltrato si comunicaba a las autoridades competentes que ella no cuidaba bien de su hija.

Cumplió su amenaza el día 6 de este mes, pero el Juzgado de Instrucción número 3 de Manacor resolvió el asunto y desestimó la denuncia por falta de pruebas.