El acusado de lanzar a su novia por un barranco de la Serra, en el juicio. | Alejandro Sepúlveda

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Un joven ha sido condenado a cinco años de cárcel por intentar matar a su pareja lanzándose con el coche por un barranco de la Serra de Tramuntana. El juicio se ha celebrado este jueves en la Sección Segunda de la Audiencia.

El hombre, de 32 años, está acusado de intentar matar a su novia, estrellando el vehículo que conducía tras producirse una discusión entre ambos. Los hechos ocurrieron al pasado verano, concretamente, al 1 de julio de 2017.

El joven tendrá que indemnizar a la víctima con 1.500 euros por daños morales y lesiones y 3.190, por el valor del coche siniestrado.

El tribunal ha tenido en cuenta la circunstancia agravante de parentesco y la eximente de enajenación mental. El joven ha aceptado también la prohibición de comunicación y acercamiento a la víctima durante 10 años.

El suceso tuvo lugar alrededor de las 23.30 horas. La víctima y el acusado, que actualmente tiene 32 años, circulaban en coche por la carretera entre Banyalbufar y Esporles. El coche era propiedad de la mujer y lo conducía el acusado.

Tal como ha aceptado, ambos empezaron a discutir hasta que en un momento dado el acusado le gritó a su pareja que «es la hora». Ella se asustó, saltó del coche en marcha y comenzó a caminar por la calzada pidiendo auxilio.

Tras esto, el hombre detuvo el coche, se bajó y la alcanzó a pie. La agarró por el cuello --le provocó síntomas de asfixia-- y la arrastró por el asfalto unos metros cogiéndola del pelo para volver a introducirla en el coche por la fuerza.

Ya dentro del vehículo, tal como sostenía la Fiscalía y él ha aceptado este jueves, «aceleró de forma súbita y repentina la marcha, aumentando deliberadamente la velocidad» y provocó la caída del coche por un terraplén con los dos en el interior. La mujer sufrió una fuerte contusión en el rostro y diferentes lesiones.

El vehículo resultó siniestro total y fue dado de baja, con un valor de 3.200 euros.
Tras el suceso, el juzgado de instrucción número 12 en funciones de guardia emitió una orden de protección a la víctima --prohibición de acercamiento del acusado--, que tal como se ha explicitado este jueves continúa vigente con las mismas obligaciones como hasta ahora.