El profesor de judo acusado de abusos sexuales, con dos de sus alumnos.

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La Policía Judicial de la Guardia Civil de Manacor continúa recabando pruebas contra el profesor de judo que supuestamente abusó de al menos once alumnos en la zona del Llevant de Mallorca. Los agentes han confirmado que la mayoría de víctimas procedían de familias humildes y desestructuradas y que el monitor se ganaba la confianza de los adolescentes con costosos regalos. Su actitud hacia los chavales no pasó desapercibida y fue expulsado de varios gimnasios por su comportamiento.

El detenido, de 43 años, sigue detenido en los calabozos de la Benemérita, a la espera de que este jueves por la mañana preste declaración en el juzgado de Manacor.

Casi todos los casos denunciados hasta la fecha son de chicos que tenían entre 11 y 14 años cuando ocurrieron los hechos. Su monitor de judo, supuestamente, los sometía a tocamientos, caricias o besos inapropiados durante los entrenamientos y también en su casa, a donde invitó a dormir a algunos de los chicos.

Los regalos que recibían los alumnos (teléfonos de alta gama, viajes o ciclomotores) llamaron la atención de los Servicios Sociales, que han colaborado activamente con la Guardia Civil durante las semanas que ha durado la investigación. El acusado está separado y tiene dos hijos menores.

En la actualidad, daba clases en un espacio que le había cedido el Ayuntamiento de Son Servera en el polideportivo y en otro local de pensionistas de Cala Millor. También trabajaba en un bar de este último núcleo turístico, en Sant Llorenç. Hasta la fecha no tenía antecedentes policiales por ningún delito, aunque hace tiempo que la rumorología lo apuntaba por su extraña actitud con los niños, con los que demostraba en público una cercanía inapropiada.

En una primera inspección en su ordenador personal, intervenido en su casa, no se han encontrado fotos o vídeos de contenido pedófilo. Sin embargo, en breve se rastreará si subió archivos a la nube.

Sin licencia

La Federación Balear de Judo confirmó este miércoles a través de un comunicado que el experto en artes marciales detenido «no tiene licencia de deportistas ni está colegiado como árbitro o profesor de judo ni de cualquier otro de los deportes adscritos a esta federación». Los supuestos abusos sexuales a alumnos menores de edad se iniciaron hace más de diez años y la Guardia Civil sigue buscando a más víctimas, que en la actualidad tendrían una veintena de años.