Imagen de una ambulancia en el lugar donde se produjo el lunes por la tarde el suceso. | Capvermell.org

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Una mujer, de 40 años de edad, falleció este martes por la mañana en el hospital de Son Espases después de no superar las graves heridas sufridas el lunes tras ser arrollada por un vehículo mientras cruzaba con su hija, mayor de edad, un paso de peatones en la avenida Juan Carlos I, en el término municipal de Capdepera.

El conductor dio negativo en la prueba de alcoholemia realizada minutos después del suceso y explicó a los agentes de la policía local que «se había despistado». Las primeras pesquisas apuntan a que estaba en lo cierto, ya que no había huellas de frenada en el lugar del accidente.

El suceso ocurrió minutos antes de las 21.00 horas del lunes. Madre e hija cruzaban el paso de peatones, a escasos metros de su vivienda, cuando se vieron sorprendidas por un vehículo de la marca Mazda. Ambas fueron arrolladas, aunque la peor parte se lo llevó Á.C. El impacto del coche la dejó gravemente herida en la calzada.

Inmediatamente después del accidente se dio aviso a los servicios de emergencias. Mientras llegaba la ambulancia se vivieron momentos de auténtica tensión en la zona. Los testigos del atropello eran conscientes de la gravedad de las heridas de la mujer. Fue traslada a Son Espases en estado crítico. Horas después, este martes por la mañana, falleció.

El conductor, un joven de 27 años de edad, tras dar negativo en la prueba de alcoholemia y explicar lo que había ocurrido, que todo se había debido a «un despiste», no fue detenido. Ahora con la muerte de la mujer cambia el escenario. El chico podría ser imputado por un delito de homicidio imprudente.

Conmoción en Capdepera

Capdepera está de luto. La noticia del fallecimiento de Á.C. cayó este martes por la mañana como un jarro de agua fría entre los vecinos y amigos de la familia, que no se podían creer lo que había pasado horas antes. Trabajaba como cajera en un supermercado de Cala Rajada y era una persona muy querida entre sus compañeros y clientes. El destino quiso que perdiera la vida a pocos metros de su casa mientras cruzaba un paso de peatones con su hija por la imprudencia de un conductor.