Los funcionarios temen que tras estas peticiones se esconda un plan para fugarse nuevamente del centro penitenciario. | CNN

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Joaquín «El Chapo» Guzmán, condenado por dirigir durante años el cartel de Sinaloa, una de las mayores organizaciones criminales que operaron el narcotráfico desde México a los Estados Unidos, ha visto como sus demandas para mejorar sus condiciones de vida en el régimen de aislamiento de la cárcel de Manhattan donde permanece recluido han sido denegadas por un juez federal.

El Chapo, famoso criminal con una carrera algo particular que se fugó hasta dos veces de prisión para evitar su extradición a suelo norteamericano, solicitó «al menos dos horas de tiempo de recreación al aire libre por semana, acceso a la comisaría principal, la posibilidad de comprar seis botellas de agua por semana y tapones para los oídos para aliviar dolores de cabeza y de oído y ayudarlo a dormir».

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Así lo recoge una información de la CNN, que sin embargo apunta a los temores de los funcionarios federales que tras estas peticiones se esconda un plan para fugarse nuevamente del centro penitenciario. De hecho su equipo legal argumentó en las pasadas semanas que el comportamiento del reo estaba siendo ejemplar, a lo que el juez de distrito respondió que eso era debido a las condiciones especiales de confinamiento a las que se sometía a el Chapo por su peligrosidad. «Es una razón para mantenerlas en su sitio», añadió.

También respondió una a una las exigencias del Chapo. El acceso a la comisaría que atiende cuestiones de los presos ordinarios fue denegado porque allí podría conseguir armas. Dijo que tiene acceso a ciertos elementos de ejercicio y dispone de una ventana que le aporta luz solar y aire fresco. Sobre las botellas de agua afirmó que ya se le suministraban, y en lo que atañe a los tapones, el magistrado dijo que no tenía sentido, pues en el juicio el condenado se negó a utilizar audífonos.

Por su parte su defensa alega que en la celda de aislamiento en la que esta recluido a la espera de sentencia está la luz encendida las 24 horas del día y el aire acondicionado es tan fuerte que apenas le deja dormir.