La cabo herida besa en la mejilla, días atrás, a la soldado que le lesionó.

TW
20

«No puedo contestar a todos los mensajes, pero estoy viva y eso es lo que importa». Es el mensaje que ha mandado a través de Facebook Sarah Ann G., la cabo que fue agredida en Magaluf por su amiga la madrugada del pasado lunes.

Con estas palabras, la joven británica intenta tranquilizar a sus amigos en la red social mientras se encuentra ingresada en el Hospital de Son Espases, en Palma. La víctima, de 22 años, ha mejorado de sus lesiones, este martes salió de la UCI y actualmente está ingresada en planta, a la espera de recuperarse.

Tras la publicación, son muchos los amigos que le han deseado una pronta recuperación a la joven militar. «Espero que te recuperes pronto», «ponte bien», «eso en lo importante», son algunos de los comentarios que se pueden leer.

Entre las muestras de apoyo, destaca el comentario que le ha dejado su madre en la publicación. «Estoy tan contenta de eso y estaba feliz de verte cara hoy mi hermosa hija. Descansa y mejórate», le ha escrito.

Noticias relacionadas

Así fue la agresión

La agresión tuvo lugar sobre las 00.55 horas en la discoteca Bananas, en Punta Ballena. Las dos amigas discutieron y la detenida golpeó con un vaso de cristal a la víctima. Agentes de la Guardia Civil de Calvià se personaron rápidamente en el local y arrestaron a Sidney C., acusada de un presunto delito de lesiones graves. La detenida explicó ante el juez que discutió con la otra amiga y la perjudicada intermedió.

La víctima, según la versión de Sidney C., le propinó primero un puñetazo en la nariz. La arrestada manifestó que tiró del pelo a su amiga y después lanzó un vaso contra el suelo que se rompió. Dos testigos declararon a los agentes de la Benemérita que la joven golpeó con el vaso a su mejor amiga.

La agresora, asistida por el abogado Miguel Ángel Ordinas, ha quedado en libertad este miércoles.