Ángel García, al frente del operativo, es una de las personas citadas en el poema. | Reuters

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La tensión vivida durante trece largos agónicos días por los expertos implicados en el rescate del pequeño Julen aflora ahora después de conocerse el más trágico de los desenlaces, la muerte del pequeño de dos años tras caer en un pozo en Totalán, en Málaga.

Un ingeniero de Caminos, implicado en el operativo, ha escrito un poema dedicado a Julen, a estos trece últimos días de enero que, reconoce, quiere borrar de vida. Allí todos, las más de 300 personas destinadas a sacar a Julen de ese pozo jamás perdieron la esperanza y siempre confiaron en el milagro.

El poema, que se ha difundido por las redes sociales, muestra la desesperación vivida durante esas intensas e incesantes jornadas de trabajo destinadas a sacar como fuera a Julen de allí, y el dolor inmenso tras confirmarse la muerte del pequeño porque, al igual que Mario Muñoz-Atanet, muchas de esas personas desplazadas a Totalán son padres y han vivido con especial angustia el suceso.

Este es el poema de Mario Muñoz-Atanet:

Trece días de este enero

Quisiera borrar de mi vida
13 días de este enero,
quisiera olvidar de mi mente
esa angustia y desespero.

Quisiera cavar con mis manos
ese monte todo entero,
quisiera encontrar el amparo
para esos padres sin consuelo.

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Quisiera quedarme con la gente
con el corazón de todos ellos,
¡Grandes!, hombres y mujeres
Que Dios los guarde a todos ellos.

Todos a una sumando
guardias, doctores, mineros,
bomberos y voluntarios
emergencias, técnicos y obreros.

Quisiera reconocer el valor
fortaleza y tenacidad,
de un caminero singular
nuestro Ángel, García Vidal.

Aceptó la responsabilidad
no dudó ni dio paso atrás,
y unió a los que fuimos a parar
a ese cerro singular.

Excavamos aquel lugar
diez días sin descansar,
pensando en encontrar,
un milagro en Totalán

No quiero medallas
méritos ni reconocimientos,
algo así no merece
que se celebre ningún festejo.

Hicimos lo que pudimos
abrazados todos a un sueño,
albergando la esperanza
de poder salvar a un pequeño.

Ahora lloro en mi cama
abrazado a mis pequeños,
y quisiera borrar de mi vida
13 días de este enero.