Rafael Pantoja, de 45 años, tras pasar a disposición judicial. | CATI CLADERA

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Rafael Pantoja, el hombre que asesinó el pasado viernes a su expareja Sacramento Roca en Conforama, ha pasado su primera noche en la cárcel de Palma tras decretar este lunes el juez su ingreso en prisión sin fianza.

El centro penitenciario le ha aplicado el protocolo antisuicidio para evitar que se autolesione, como ya pasó cuando estuvo bajo custodia policial cuando fue detenido.

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En esa ocasión, se golpeó en la cabeza contra las paredes del calabozo, por lo que la Policía tuvo que llamar a un médico que aconsejó que el hombre fuera ingresado en el módulo de detenidos de Son Espases, hasta donde estuvo tras pasar a disposición judicial.

Sobre las 16.00 horas de este pasado lunes fue trasladado a los juzgados de Vía Alemania para declarar ante el juez de instrucción número 1 de Palma, Juan Manuel Sobrino. Algo que no hizo, ya que se acogió a su derecho de no declarar.

Las únicas palabras que ha pronunciado Rafael Pantoja tras su detención y sobre el crimen han sido las que les dijo a los policías que lo custodiaron hasta los juzgados: «No sé qué he hecho, se me ha ido la cabeza».